Caos en la NBA

La Liga de baloncesto más prestigiosa, tantas veces tomada como modelo, se sume en el peor de los escenarios. Después de 102 días de cierre patronal y de maratonianas, pero infructuosas, reuniones entre las partes en litigio, los propietarios de los clubes y los jugadores, la NBA ha colgado en su puerta el cartel más indeseable: cerrado por falta de acuerdo. Por el momento, David Stern, el comisionado, ha cancelado las dos primeras semanas de la competición, que tenía que empezar el 1 de noviembre con un partido entre el campeón, Dallas Mavericks, y Chicago Bulls. Las posiciones están muy enconadas. "Esto no es una huelga, sino un cierre patronal. Hemos ido más allá de lo razonable en nuestras propuestas", se justifica el presidente del sindicato de jugadores, Derek Fisher. "Nos separan muchas cosas, un abismo, en casi todos los asuntos", sentencia Stern.

- Causas del conflicto. La principal es el desacuerdo en torno al reparto de los ingresos. Los clubes aseguran que la pasada temporada perdieron 300 millones de dólares (219 millones de euros). Concluido el anterior convenio colectivo y sin acuerdo para renovarlo, los clubes decretaron el 1 de julio el cierre patronal. Los jugadores ingresaban hasta ahora el 57% de los ingresos globales de la NBA, 3.150 millones de euros, aunque hay que deducir una parte y, a la hora de repartir, computan 2.700 millones. Ahora no desean rebajar su parte del pastel más allá del 53%. Cada punto porcentual se cifraba la pasada temporada en 29,3 millones de euros. La última propuesta formal de los clubes era del 47%. En consecuencia, la diferencia que separa ambas partes se cifra en 175,9 millones anuales.

- Pérdidas. Son 100 los partidos previstos en el calendario oficial de la temporada regular entre el 1 y el 14 de noviembre. Según fuentes de la NBA, los clubes dejarán de ingresar un total de 300 millones de euros. Al mismo tiempo, el cierre patronal implica que los jugadores dejen de percibir la parte correspondiente de sus fichas anuales. La NBA calcula que estos perderán en ese periodo 135,5 millones. La cancelación de los 114 partidos de la pretemporada ya provocó que los clubes dejaran de ingresar unos 146 millones de euros. La suspensión de las actividades perjudica gravemente a los trabajadores de los clubes, muchos de ellos contratados a tiempo parcial con ocasión de los partidos. Los clubes, además, se las ven y se las desean para vender los abonos de una temporada que se desconoce cuándo comenzará y de cuántos partidos constará. Según Sports Illustrated, solo por la venta de entradas en estas dos semanas se perderán 61 millones de euros.

- Antecedente. El único cierre patronal que ha afectado a los partidos de la NBA se produjo en la temporada 1998-1999. Entonces, la competición se redujo a 50 partidos de la fase regular por equipo en vez de los 82 habituales. El título lo ganó entonces San Antonio Spurs.

- Desembarco en Europa. Son ya más de 50 los jugadores de la NBA fichados por clubes europeos o chinos mientras se prolonga el cierre patronal de la NBA. Entre los más destacados están Rudy Fernández (Real Madrid-Dallas), Deron Williams (Besiktas-Nueva Jersey), Tony Parker (Villeurbanne-San Antonio), Danillo Gallinari (Olimpia Milán-Denver), Andrei Kirilenko (CSKA Moscú-Utah), Kevin Seraphin (Caja Laboral-Washington), Nicolas Batum (Nancy-Portland), JR Smith (Zhejiang-Denver), Wilson Chandler (Zhejiang-Denver) o Kenyon Martin (Xingiang-Denver). La mayoría de ellos regresarán a sus clubes de la NBA una vez concluya el cierre patronal, si es que no se prolonga toda la temporada.

- Cómo fichar a un 'nba'. Los equipos europeos se enfrentan a un grave problema a la hora de fichar a un jugador importante de la NBA. Aquellos que tienen contratos muy elevados deben hacer frente al pago de un seguro médico que cubra cualquier posible lesión, accidente o enfermedad. Parker, por ejemplo, con un contrato con los Spurs por el que debe percibir 27,5 millones de euros hasta 2015, se paga de su bolsillo 190.000 euros por ese concepto para jugar con el Villeurbanne hasta diciembre. Pau Gasol tiene un contrato muy similar con los Lakers hasta 2014. Además de esa premisa, el pívot español, en principio, solo contempla la posibilidad de fichar por un equipo europeo si se cancela toda la temporada. Mientras tanto, él mismo se paga un seguro médico para evitar cualquier contingencia mientras se entrena con el Barcelona Regal. En la misma situación se encuentra José Manuel Calderón (Toronto Raptors), que ha optado por el filial del equipo azulgrana porque de esa forma está junto a su preparador físico personal desde hace muchos años, Joan Ramon Tarragó.

- Marc Gasol. La situación del pívot de los Grizzlies, que también se entrena con el Barcelona, es diferente. La última temporada concluyó su contrato con el equipo de Memphis. Ahora es agente libre restringido. Eso significa que puede recibir ofertas de cualquier equipo de la NBA -una vez que concluya el cierre patronal-, aunque los Grizzlies pueden igualarla para retenerlo. Es un arma de doble filo. Puede fichar por un equipo europeo y no tiene obligación de volver a la NBA. Pero, dada su calidad y su excelente rendimiento la pasada temporada, es uno de los pívots más deseados en la NBA y es seguro que le van a ofrecer un contrato multimillonario.

- Ofertas por Ibaka. El pívot de Oklahoma Thunder permanece en Miami, donde efectúa tres sesiones diarias con un entrenador personal recomendado, entre otros, por Kevin Durant. Varios clubes españoles punteros se interesan por su fichaje. El Barcelona Regal es uno de ellos. En su plantilla queda un hueco para un jugador formado en España. Ese es el caso de Ibaka, que jugó en L'Hospitalet y Manresa y se nacionalizó español el pasado verano. También el Caja Laboral y el Unicaja se han interesado por Ibaka e incluso el Manresa, club en el que estaría dispuesto a jugar de nuevo por una cuestión sentimental, ya que fue en él donde se dio a conocer en la élite del baloncesto español. El seguro médico de Ibaka sería muy inferior al de Pau Gasol, ya que el jugador de los Thunder tiene un contrato muy inferior en la NBA. El fichaje de Ibaka es mucho más asequible que el de los Gasol, ya que su contrato es mucho más modesto: debe percibir de los Thunder 2,5 millones de euros en los dos próximos años.