El Bicentenario, "proyecto de Estado"

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, se estrenó ayer en otro de sus cargos, el de presidente de la Comisión Nacional del Bicentenario de la Constitución de Cádiz. "Un proyecto de Estado que nos implica a todos", dijo en su primer discurso. La capital gaditana se convertirá el año que viene en sede de encuentros políticos, sociales y culturales. Entre los proyectos valorados ayer, el que los plenos del Congreso y del Senado puedan reunirse en 2012 en el oratorio San Felipe Neri, lugar donde los diputados doceañistas aprobaron la Carta Magna 200 años antes.

Chaves sucede en el cargo de presidente de la Comisión Nacional a Alfredo Pérez Rubalcaba, que abandonó este puesto, heredado de María Teresa Fernández de la Vega, cuando dejó el Gobierno para ser candidato. La Comisión no se reunía desde la etapa de la vicepresidenta. Ayer recuperó la actividad con un encuentro entre todas las partes para fijar los detalles de la programación prevista para el año que viene, presentada ya por el Consorcio del Bicentenario y el Ayuntamiento, y animar nuevas iniciativas. "Creemos que una buena manera de reflejar la importancia de aquella reunión en el oratorio sería reunir a los diputados o senadores españoles en el mismo lugar". La propuesta, a iniciativa del Consistorio gaditano, se unirá a otras relacionadas con la comisión de Derechos Humanos de la ONU y de los parlamentos europeos e iberoamericanos.

La Comisión Nacional del Bicentenario, encabezada por el Gobierno central, es la encargada de preparar la conmemoración, aunque es el Consorcio, liderado por la Junta con representantes de otras administraciones, el que decide las actividades y ejecuta las inversiones previstas. Chaves examinó la programación y celebró el avance de las infraestructuras directamente relacionadas con la efeméride, como el segundo puente sobre la bahía de Cádiz, al 80% de ejecución, la llegada de la alta velocidad ferroviaria, al 77%, o la rehabilitación del castillo de San Sebastián, el más retrasado.