Azkuna, de pie contra el cáncer

"Nada de tres meses fuera del Ayuntamiento". Iñaki Azkuna fue taxativo ayer para rechazar los primeros presagios sobre el alcance del tratamiento médico al que será sometido por el cáncer de próstata que padece desde hace ya ocho años. De hecho, el alcalde de Bilbao espera compatibilizar su cargo con las sesiones a las que será sometido. En función de la respuesta que ofrezca a este tratamiento dosificará su presencia en la actividad municipal. Lógicamente, los grandes viajes quedan descartados y a partir del lunes la alcaldía en funciones recaerá en Ibón Areso, una de sus personas de máxima confianza en el equipo de gobierno municipal del PNV.

Azkuna se alarmó cuando supo que en los medios de comunicación se situaba en tres meses el plazo de su ausencia en las tareas de alcalde. "Me he caído de la cama cuando lo he leído", llegó a decir en el tono de humor que mantuvo durante todo el día de ayer en el que desplegó una amplia actividad, asistiendo al congreso sobre drogas en la Universidad de Deusto, en presencia de la Reina, y a la inauguración del Festival de la Risa, al que llegó caminando en un gesto bien significativo.

"Me he caído de la cama cuando he leído que estaría fuera tres meses"

El alcalde bilbaíno (Durango, 1943) confirmó que la próxima semana comenzará a recibir "un tratamiento intensivo" contra el cáncer de próstata, pero descartó que lleve implícito su ausencia del Consistorio. "Los médicos me han dicho que no, que voy a poder compatibilizar perfectamente el Ayuntamiento con el tratamiento y eso es lo que espero yo. Otra cosa es que esté un par de días o tres fastidiado, pero eso de que en tres meses no voy a aparecer por el Ayuntamiento, es tremendo", reconoció en una improvisada rueda de prensa, celebrada ayer en Bilbao.

En cuanto a sus previsiones, Azkuna reconoció que su esperanza es acudir al Ayuntamiento "todos los días que pueda". De momento, hoy afrontará un complicado pleno municipal que llega en plena resaca del polémico desalojo del edificio ocupado por el gaztetxe Kukutza y que ha abierto una grieta considerable en las relaciones entre el PNV y Bildu a nivel municipal. Solventado este pleno, la previsión de Azkuna es que Ibón Areso tome las riendas a partir del lunes, pero manteniendo esa relación directa sobre los temas de mayor trascendencia.

Tras conocerse la decisión de Azkuna de acometer este tratamiento de choque contra su enfermedad de próstata, se sucedieron los mensajes de apoyo. La ministra de Sanidad, Leire Pajín, aprovechó ayer su presencia en Bilbao para transmitir al alcalde "toda la energía y toda la fuerza para los próximos días y mostró, de paso, toda su "confianza en la eficacia en Osakidetza y la sanidad pública vasca". El lehendakari, Patxi López, le trasladó personalmente "mucho ánimo" y le deseó "una pronta recuperación". En un encuentro privado, en Deusto, López le confió ayer que "le vaya lo mejor posible".

Por su parte, el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, transmitió su "ánimo" al alcalde de Bilbao, a través de Twitter. También el exalcalde de San Sebastián Odón Elorza deseó a Azkuna que vuelva "fuerte, animoso y pletórico, con esa flema entre bilbaína y británica". Elorza añadió que "le deseo lo mejor, porque debo reconocer desde esta orilla que es un gran alcalde", aseguró en Zarautz.

Antonio Basagoiti habló personalmente con Azkuna. "Me cae muy bien. Lo único que le deseo es que el tratamiento le vaya muy bien, que dentro de poco esté trabajando al frente del Ayuntamiento y podamos apoyarle o discutir con él". El líder de los populares vascos recordó que se trata de "un buen alcalde, un buen político, y le deseo de corazón que gane al cáncer".