¿El secreto del flechazo Bruni-Sarkozy?: las flores

Hace cuatro años, cuando saltó la noticia del romance entre el recién elegido y recién divorciado presidente, el hiperactivo Nicolas Sarkozy, y la exmaniquí y cantante de izquierdas, la tranquilísima Carla Bruni, muchos no acabaron de creérselo. Entonces se supo que la pareja se había conocido en una cena de grupo organizada por un amigo del mandatario y que lo suyo fue "amor a primera vista". A punto de dar a luz, la ahora primera dama revela, con un toque de romanticismo, una escena bucólica por los jardines presidenciales en la que se dejó seducir por una faceta desconocida del mandatario: su pasión y sus conocimientos por las flores.

"Cuando le conocí, paseando por los jardines del palacio del Elíseo, estaba todo el rato dando los nombres de las flores", explica Bruni en una entrevista a la radio de la cadena británica BBC, que se emitirá hoy. "Conoce todos los nombres en latín, todos los detalles sobre tulipanes y rosas", añade. "Me dije: 'Dios mío, tengo que casarme con este hombre, es el presidente y también sabe los nombres de las flores. Esto es increíble", confiesa a su amiga, la periodista francesa Christine Okrent, esposa del exministro de Exteriores de Sarkozy, Bernard Kouchner.

Bruni, que no ha hablado abiertamente de su embarazo hasta principios de este mes, justifica su discreción porque es "muy supersticiosa". Pese al revuelo que ha provocado en la prensa nacional e internacional la noticia desde que se empezó a filtrar en mayo, la exmodelo de 43 años asegura que hay "tantas mujeres que están esperando un niño que es poco interesante para los franceses". "Es una noticia fantástica para mí, pero es también muy banal", concluye.

La pareja, que espera para este otoño su primer hijo juntos -ella tiene uno y él, otros tres-, se casó en febrero de 2008, apenas unos meses después de conocerse. "Casarme con él es algo muy rock and roll para alguien como yo", reconoce entre risas Bruni. E insiste: "Ser capaz de cambiar tu vida de un día para otro es muy rock and roll". "También para él, a fin de cuentas, ¡yo soy una cantautora!".

En realidad, todo lo que rodea a la pareja presidencial supone un cambio respecto a las anteriores. Como dice Bruni en la entrevista, su marido es "un tipo de presidente diferente", dos veces divorciado y ahora casado con una artista. Su bebé será, de hecho, el primero en nacer de un presidente en ejercicio, algo que para la futura madre supone que "el mundo moderno" entra en el Elíseo.