Primera jornada: la internacionalización y otras cosas del vestir

- Tiziana, hija del diseñador Adolfo Domínguez y actual directora creativa de la firma, apostó por piezas inspiradas en la California de los años sesenta y en las libélulas, según sus propias palabras. Puede que no fuese la colección más sobresaliente de las que se vieron ayer, pero esta casa no necesita del triunfo en Cibeles para tener éxito como marca. Abre una tienda cada tres días, fundamentalmente en Latinoamérica, Asia y en los países árabes, los mercados por los que quiere expandirse. "Gracias a la internacionalización hemos podido compensar la caída de ventas en España y mantener el mismo ritmo de crecimiento de los dos últimos años", apunta la diseñadora. El objetivo de la firma gallega es que en 2015

el 50% de su facturación ya provenga del extranjero.

- Temporada tras temporada, gana altura la propuesta de Juan Duyos (en la imagen, una de sus siluetas). Para la próxima, propone la más funcional de todas las colecciones que ha presentado hasta la fecha, pero no menos espectacular y sofisticada que las anteriores: volúmenes y siluetas lápiz se contraponen en vestidos con cierto regusto años cincuenta. Las sedas naturales y lamés

en una amplia y delicada paleta de colores encuentran su complemento perfecto en las pamelas de paja diseñadas por Mabel Sanz. Un esfuerzo que tiene más de artístico y promocional que

de comercial.

- Miguel Palacio, como en la edición anterior, mezcla en la pasarela su propia colección con prendas de las que diseña para Hoss Intropia. El creador asegura que le es imposible separarlas, aunque la diferencia de precio y de tejido sea sustancial. En especial en esta temporada, donde los materiales de su firma se vuelven especialmente ricos: guipures con hilo de lurex, cady elástico de seda, organza bordada y redes de pailletes. Aún así insiste en que crea ambas "con el mismo espíritu". De hecho, empieza por la de Hoss -ya que debe producirse con mucha antelación- y a partir de ella desarrolla la suya.

- Sobredosis de volantes, brocados y demás referencias barrocas en la colección presentada por Victorio & Lucchino, que comenzó de forma esperanzadora con vestidos de algodón en degradé para luego perderse por caminos muy largos y secundarios. ¿Emplearán alguno de estos códigos en el traje de novia que preparan para la duquesa de Alba?-