La familia del desaparecido carga contra el alcalde de Getafe

El secretario general del PP en Madrid, Francisco Granados, organiza cada martes un desayuno en la sede del partido en la calle de Génova al que asisten los periodistas. Invita cada semana a un alcalde de su formación al que pide que ofrezca en la medida de lo posible alguna exclusiva o revelación. Ayer le tocó el turno al primer edil de Getafe, Juan Soler, quien abordó muchos temas, entre otros la desaparición de Antonio López López, un vecino de 29 años de Perales del Río del que su familia no sabe nada desde el 20 de agosto. Soler dijo que, según la información que le había facilitado la policía, el hombre se fue de su casa de forma voluntaria y que tiene "antecedentes penales".

"¿Qué ha pretendido decir con eso el alcalde?", se pregunta la hermana

Esta última aportación sobre el pasado de Antonio López, que no añade aparentemente nada a su búsqueda, indignó a su familia, que pidió al alcalde que respetase su intimidad. "¿Qué ha pretendido decir con eso? ¿Por tener antecedentes alguien no puede desaparecer?", se preguntaba su hermana, Mercedes López, quien aseguraba desconocer hasta ese momento lo revelado por Soler.

En efecto, la investigación policial, después de indagar entre los amigos y repasar los días previos a la desaparición de Antonio, se inclina por la tesis de que el hombre se fue por su propia voluntad. No obstante, los protocolos que se aplican a la hora de buscar a una persona tras una denuncia continúan en marcha, según informó la Jefatura Superior de Policía. Respecto a lo que había detallado Soler sobre el hombre, fuentes policiales señalaron que los mismos agentes tienen mucho cuidado a la hora de difundir este tipo de datos sobre un detenido, más aún si se trata de un desaparecido que no ha cometido ahora ningún delito.

Soler quiso zanjar de una vez por todas la posible vinculación entre la desaparición de Antonio López y la muerte de los dos jóvenes de 18 años ocurrida en el mismo barrio, Perales del Río. La policía verificó tras conocer la denuncia si López había estado en esa fiesta y pudiese ser uno de los que probaron la infusión de estramonio, una planta alucinógena y venenosa, cuya ingesta fue determinante para que los otros dos chicos muriesen por un golpe de calor en un descampado. Descartada esta opción, las investigaciones se encaminaron hacia la otra dirección, la de que López se marchó por voluntad propia. Los familiares anoche aún no habían recibido noticias suyas. El portavoz de la familia, Nicanor Brice-ño, también presidente de la asociación de vecinos del barrio y exasesor del alcalde socialista Pedro Castro, mostró su disgusto por las declaraciones de Soler.

El alcalde además anunció que el caserón donde se celebró la rave, un lugar abandonado, "seguramente" albergará un servicio que contemple la protección del medio ambiente. El alcalde resaltó el buen entendimiento que tiene con la familia propietaria de la finca para llegar a algún tipo de acuerdo. La familia dejó sin uso la finca a mediados de los años noventa y desde entonces esta ha sido ocupada, hasta estar prácticamente semiderruida, por gente que organizaba fiestas o practicaba el espiritismo. IU había propuesto en 2009 levantar ahí un centro de estudio sobre la memoria histórica.

Por último, Soler acusó a su antecesor en el cargo, Pedro Castro, de haber tejido durante su mandato una red de asociaciones afines que cobraban "subvenciones millonarias".