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Crítica:PISTAS GASTRONÓMICAS
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Un fino salmorejo junto a la playa

José Carlos Capel

Aunque está recién construido, parece que lleva meses en funcionamiento. No en vano, constituye una prolongación del prestigioso complejo Finca Cortesín (www.fincacortesin.com), hotel que alberga dos restaurantes de tanto éxito como el del italiano Andrea Tumbarello (Don Giovanni) y el holandés Shilo Van Coevorden (Shilo), cuya comida asiática de fusión causó verdadera conmoción hace dos años.

Un espacio amplio, sobre la misma playa, a medio camino entre Marbella y Sotogrande, frente a una de las torres de vigilancia que flanquean las costas malagueñas en la proximidad del Estrecho, construidas en el siglo XVI para avistar los ataques de piratas berberiscos.

En cierto modo se trata de un calco de El Jardín, tercero de los restaurantes que alberga este hotel a dos kilómetros tierra adentro, especializado en cocina española, pero adaptado a las exigencias de un enclave de playa. De ahí algunas de sus especialidades, como las sardinas a la teja, los boquerones fritos y los moluscos de la zona.

Un salmorejo muy fino

Al frente de sus cocinas, Paco Corrales, que supervisa una carta sencilla basada en sopas frías, frituras, pescados, arroces y carnes a la plancha. Es lógico que con toda la experiencia que lo respalda el nuevo beach haya abierto sus puertas con el rodaje ya terminado. En el apartado de sopas frías, el clásico gazpacho andaluz, ajo blanco malagueño y un salmorejo muy fino que se remata con ventresca de atún y huevo duro. Están bien las croquetas de jamón ibérico y salen airosas sus frituras (calamares, boquerones), que acompañan con ensaladas de pimientos asados a la andaluza. Tampoco se echan en falta las almejas a la marinera, los lenguados a la plancha y los calamares encebollados.

Otra de las mejores opciones en este enclave son los grandes pescados del Estrecho, pargos, besugos, urtas o sargos, que se preparan con acierto al horno o a la plancha. Pasan el aprobado por los pelos sus arroces, y como colofón, chuletitas de cordero, brochetas o pechugas de pollo de corral a la parrilla. Todo muy sencillo. De postre, macedonias de frutas y unos magníficos helados y sorbetes.

<b>Terraza del Cortesín Beach Club, en Casares (Málaga).</b>
Terraza del Cortesín Beach Club, en Casares (Málaga).JULIÁN ROJAS

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Sobre la firma

José Carlos Capel
Economista. Crítico de EL PAÍS desde hace 34 años. Miembro de la Real Academia de Gastronomía y de varias cofradías gastronómicas españolas y europeas, incluida la de Gastrónomos Pobres. Fundador en 2003 del congreso de alta cocina Madrid Fusión. Tiene publicados 45 libros de literatura gastronómica. Cocina por afición, sobre todo los desayunos.

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