Bildu ofrece a PNV y Aralar ir juntos a las generales
La coalición Bildu, que integra a la izquierda abertzale, EA y Alternatiba, se ha decantado por presentarse a las elecciones generales del 20 de noviembre mediante una fórmula electoral abierta a otras formaciones políticas, entre las que tendrían cabida el PNV, Aralar y Ezker Batua (EB). Dirigentes de la agrupación soberanista presentarán hoy en San Sebastián una propuesta electoral que persigue reunir a las fuerzas nacionalistas que tengan como objetivo "la defensa de Euskal Herria como nación y su derecho a decidir libre y democráticamente".
La iniciativa "inclusiva" pretende aglutinar a fuerzas independentistas, como Aralar, y está abierta a otros partidos y colectivos -entre los que podría englobarse al PNV- en cuyo ideario figure "la construcción nacional de Euskal Herria". Aralar ya ha sometido a debate entre sus afiliados la opción de concurrir en coalición con Bildu. Por su parte, el PNV ha anunciado que su prioridad en la próxima legislatura en el Congreso consistirá en defender la propuesta de nuevo estatus político que supere el actual modelo autonómico vasco.
Críticas a Garitano
El ofrecimiento de Bildu a las fuerzas nacionalistas se produce precisamente cuando estas han decidido elevar el nivel de exigencia a la coalición abertzale, tras constatar que sus dirigentes y representantes públicos están prodigándose con gestos de cercanía con los presos de ETA y descuidan a las víctimas de la banda terrorista. La mayor carga de las críticas provino ayer de Aralar y del sector más soberanista del PNV. Coincidieron en que no hay que esperar más tiempo, como defiende Bildu, para reconocer el daño causado por ETA.
En referencia a las manifestaciones de Martin Garitano, máximo mandatario de Gipuzkoa, en las que consideraba que el momento de las víctimas aún no ha llegado, Aralar le acusó de "no querer afrontar una realidad que es incómoda y dolorosa", en alusión al dolor causado a las víctimas del terrorismo en Euskadi. El partido que lidera Patxi Zabaleta le recuerda a Garitano que "abordar y solucionar el tema de los presos y las víctimas no es una consecuencia de la solución del contencioso, sino una parte indisoluble de dicha solución, y no debe ser relegado a ningún momento ni estadio posterior". En similares términos se pronunció el peneuvista Joseba Egibar, al considerar que "no hace falta esperar a nuevos tiempos para reflexionar sobre el reconocimiento del dolor causado".
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