El 'pichichi' espera la llamada de Mourinho
"Dio un salto como Rafa Nadal en las gradas de Wimbledon, subió, me dio un beso y me pidió una bandera de España", dice Alfonso, el padre de Álvaro Morata, el pichichi del Europeo sub 19. En su blackberry ya lleva la foto: su hijo recogiendo el trofeo de máximo goleador (seis tantos) y él mirándolo desde lejos y enfundado en la camiseta con la que el delantero del Castilla, el filial del Real Madrid, disputó el Mundial sub 17 de Nigeria 2009. "Me he pasado el viaje mirando las imágenes que grabé. Nunca había gritado tanto", confiesa.
Álvaro es un gigantón de 1,87 metros, pero hubo una época en la que era el pequeñito del grupo. Con 13 años, cuando ingresó en las categorías inferiores del Atlético, se escondía, le costaba adaptarse, recuerdan los responsables del fútbol base rojiblanco. De repente, pegó un estirón y pasó a ser el larguirucho. Igual que ahora. En la selección sub 19 nadie le hace sombra. "Es un delantero hecho y derecho. Ha ganado fuerza física y le veo mucho más coordinado en los movimientos", dice Armando de la Morena, que le tuvo en el Cadete B. "Tiene muy buenas condiciones. Lo único que necesita es confianza y competir en el primer nivel", subraya Luis Milla, el seleccionador sub 20, desde el Mundial de Colombia.
"Es más completo que Morientes porque va mejor con los pies", dicen los expertos
Para ese primer nivel no estaba preparado el curso pasado, según Mourinho. Morata debutó con el Madrid, en el Bernabéu, en diciembre de 2010 contra el Zaragoza. Disputó dos minutos. Ante el Levante, en la Copa, 14. Con Higuaín en el quirófano, el portugués reclamó el fichaje de un delantero: "Morata no está aún preparado. Primero tiene que marcar goles en el Castilla. La temporada que viene estará con nosotros como cuarto delantero". De momento, no figura en la primera plantilla en la web del club, sino en el Castilla, en el que, efectivamente, marcó 15 goles. Fue una de las claves, junto a Jesé y Sarabia, para que el equipo, en manos de Toril desde enero, remontara. Con los padres de Sarabia, ahora en el Getafe, hizo precisamente la vuelta Alfonso: "Ángel Torres [el presidente del club azulón] está como loco por fichar a mi hijo. Nosotros estamos tranquilos. Álvaro sabe que tiene 18 años y mucho que aprender. Hemos acordado con el Madrid que se entrenará con el primer equipo y jugará en el Castilla. Subirá cuando Mourinho decida convocarlo".
El técnico luso no se ha dejado seducir por Morata. Sí Julen Lopetegui y Milla en las selecciones, los responsables del Atlético y los preparadores de La Fábrica. A todos les recuerda a Morientes. "Le veo más completo que él porque es mejor con los pies. En el juego aéreo no he visto nada igual. Técnicamente, es el mejor de la cantera blanca", dijo Sergio Piña, que le tuvo en el Juvenil C. La preocupación de Alfonso es que su hijo aprenda a soltar los codos en vez de saltar con los brazos caídos. "El portero de Irlanda le hizo una brecha en la cabeza. Vuelve con cuatro grapas de recuerdo, de las de acero...", bromea.
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