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L'Alcora rechaza la incineradora autorizada por Medio Ambiente

Asociaciones vecinales, colectivos ecologistas y todos los grupos políticos del Ayuntamiento de L'Alcora, incluido el PP, que gobierna en minoría desde el 22 de mayo, reunieron ayer a alrededor de 1.500 personas que se oponen a la instalación de la planta incineradora de residuos industriales que la empresa Reyval quiere construir a tres kilómetros del núcleo urbano, y para la que consiguió la autorización ambiental integrada el pasado 15 de junio de la Consejería de Medio Ambiente que dirige la castellonense Isabel Bonig. En la protesta también había representantes de localidades limítrofes, como Les Useres y Lucena.

La planta tiene previsto quemar un total de 135.000 toneladas al año de residuos "tóxicos y peligrosos", recalcó ayer la alcaldesa del PP, Merche Mallol, quien animó a las movilizaciones y anunció la presentación de un recurso de alzada contra la decisión de la consejería. Mallol considera que el Consell no puede permitir la construcción de la incineradora porque "ha demostrado una gestión irresponsable". Recuerda que la semana pasada, la empresa "volvió a incurrir en una falta grave" al descubrirse que "almacenaba de forma clandestina" contenedores con residuos tóxicos y peligrosos que carecían de "cualquier sistema de seguridad".

Los residuos eran dos millones de litros de un producto altamente inflamable "que corría serio riesgo de explosión", según el portavoz de la plataforma No a la Contaminació, Antoni Albert, por lo que el Consell sancionó a la firma con una multa de 200.000 euros por incurrir en una falta administrativa grave.

Sin embargo, el departamento que dirige Isabel Bonig defiende la instalación por "cumplir con todos los requisitos" medioambientales. Medio Ambiente, que prefiere sustituir el término "incineración" por el eufemismo "oxidación térmica", incide en que "no hay ninguna razón" para denegar la planta. No obstante, la plataforma No a la Contaminació sostiene que la incineradora puede tener "serias consecuencias" tanto en la contaminación del aire como de los acuíferos, y los "humos tóxicos" propagarse "desde la costa al interior" en la comarca de La Plana debido al régimen de vientos.

Alrededor de 1.500 personas participaron en la concentración de protesta contra la incineradora de L'Alcora.
Alrededor de 1.500 personas participaron en la concentración de protesta contra la incineradora de L'Alcora.ÀNGEL SÁNCHEZ
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