Cuestiones de ética cotidiana

Pero ¿qué está pasando? Los directivos de unas corruptas y perversas entidades financieras llamadas agencias de rating, deciden desde sus despachos a qué país hunden para que los especuladores sigan engordando sus ya obscenas ganancias económicas. Y no pasa nada.

Unos indignos "informadores" de un tabloide sensacionalista británico del grupo Murdoch, interceptan y espían comunicaciones privadas, alentando así la esperanza de unos desesperados padres de que tal vez su hija desaparecida estuviera viva; eso ha dificultado la investigación policial que podría haber dado con el asesino mucho antes de cuando ha sido detenido. ¿Y tampoco pasa nada?

¿El expresidente de Gobierno que tanto gusta de darnos lecciones de ética, actual asesor del grupo Murdoch, piensa seguir cobrando de ese imperio periodístico infame? La dignidad exigiría desmarcarse y renunciar a jugosos beneficios económicos, pero ¿qué está pasando? Pues que los que deberían ser referentes en valores, los han enterrado bajo toneladas de dinero. Y sí, seguirá cobrando.