Un utensilio de cocina gana el Delta de Oro del diseño
El FADFest llegó a su culminación anoche con la entrega de la 34ª edición de los Premios Delta, que reconocen el mejor diseño industrial de los últimos dos años. Un jurado internacional, que ha valorado más los criterios ecológicos y la sostenibilidad que el aspecto formal de los productos, ha concedido el Delta de Oro al Asador creado por Compeixalaigua Designstudio y fabricado por Lekué, por su capacidad de aunar los beneficios de la cocción al vapor con un acabado crujiente.
Los Delta de Plata se han repartido entre seis productos muy distintos entre sí: el Bugaboo Donkey, un cochecito convertible para uno o dos niños de Max Barenbrug y Dijkstra-Hellinga; el sistema de iluminación You-Turn de Delta Light; W+W, el lavabo con WC integrado que utiliza el agua residual y permite ahorrar hasta el 25%, diseñado por Gabriele & Oscar Buratti para Roca, y la embarcación de motor eléctrico, Silennis S.020 de Igor Esnal. También han recibido un Delta de Plata dos de las estrellas del diseño contemporáneo: Konstantin Grcic con Chair B, una pieza de "alta artesanía", que combina madera y aluminio, construida por la empresa barcelonesa BD, y Martín de Azúa con Get Up, una colección de asientos de esparto, fabricados en la región de Murcia con la idea de "recuperar un oficio tradicional para convertirlo en un objeto contemporáneo".
Los Premios Delta se estrenaron en 1961 con la célebre vinagrera de Rafael Marquina y desde entonces han premiado objetos tan emblemáticos como la motocicleta Impala de Leopoldo Milá, el cenicero Copenhague de André Ricard y el exprimidor Citromatic de Rams & Lluelles. Este año por primera vez, los 76 productos finalistas se exhiben en la muestra El mejor diseño del año.
