Interior permite volver a trabajar a la mayoría de los policías imputados

Desde el pasado miércoles, vuelven a vestir el uniforme y a portar placa y armas reglamentarias la mayoría de los policías nacionales imputados en la Operación Carioca que permanecían suspendidos de empleo y sueldo en la comisaría de Lugo. Del total de agentes imputados, una decena, cuatro nunca tuvieron que dejar sus puestos, mientras que los otros seis, sobre los que recaen más imputaciones, fueron provisionalmente suspendidos. De estos últimos, Interior, a través de la Dirección General de la Policía, ha permitido reincorporarse al trabajo a cinco, aunque uno de ellos, el inspector jefe de Extranjería, Evaristo Rodríguez, ha pasado a segunda actividad, una especie de prejubilación.

En algunos colectivos profesionales ha sorprendido el levantamiento de la suspensión, que solamente ha dejado fuera a Eduardo Castro, el subinspector de Extranjería que fue detenido en octubre de 2010 y es investigado por los supuestos delitos de colaboración con la prostitución, omisión en el deber de perseguir delitos, cohecho, prevaricación, tráfico de influencias y falsedad documental.

Los agentes que han regresado a su actividad policial son los otros cuatro que prestaron declaración en el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo en calidad de detenidos. Se trata de los hermanos Antonio y Luis Ferreiro, José Manuel Díaz Suárez y Manuel Castro. Este último es sobrino de otro agente imputado en la Carioca, Manuel Ángel González López, líder de la Unión Federal de Policía en Galicia y miembro del Consejo de Policía Nacional. Los dos, sobrino y tío, forman parte del equipo de fútbol de la policía, que patrocinaba uno de los cabecillas de la trama investigada en Lugo, el proxeneta del Queen's José Manuel García Adán, uno de los pocos imputados por la juez que sigue encarcelado.

Manuel Castro, también sindicalista, ha regresado a su labor en el grupo de Patrimonio, del que hace dos semanas fue trasladado otro agente. Figura ya como imputado en otra investigación anterior por un delito de falsedad en documento.