Una delantera 'mundial'

La Copa América huele a gol. Mire uno al equipo que mire, cualquiera tiene gol. Algo ha cambiado, además, en la mentalidad de los entrenadores sudamericanos. Dicen que la escuela del Río de la Plata tiene algo de culpa: Claudio Borghi, en Chile; Checho Batista con la selección anfitriona, Argentina; El Maestro Tabárez con Uruguay; Quinteros en Bolivia; Markarián al frente de Perú y hasta el Tata Martino, con Paraguay y por supuesto el argentino que dirige a Costa Rica, Ricardo La Volpe, se han empeñado en cambiar los hábitos que atenazaron el talento de los futbolistas sudamericanos al final del siglo XX. A ellos hay que sumarles, claro, la inequívoca voluntad ofensiva de Brasil, sublimada desde la llegada de Mano Menezes después de varios años bajo los corsés de Dunga. Todos ellos manejan equipos con más ataque que defensas. En todos hay delanteros muy potentes para una Copa América que comenzó anoche con el encuentro Argentina y Bolivia y que esta noche (20.30, Canal + Liga) vive su segundo capítulo con el Colombia-Costa Rica.

Messi, Agüero, Cavani, Falcao, Tévez, Barrios, Alexis, Luis Suárez, Forlán, Neymar...

Se da el caso, además, de que la mayoría de los equipos llegan rodados. Excepto Menezes, cuya apuesta con la canarinha pasa por preparar el próximo Mundial a conciencia -se disputa en su casa en 2014- y que aparece libre de presión, o México, que comparece con la selección sub 22 -diezmada además por los escándalos sexuales- después de ganar la Copa Oro, el resto de selecciones lleva con acumuladas horas de vuelo, porque incluso Chile, con el argentino Borghi, que sustituyó a Bielsa tras el Mundial, mantiene parte del camino marcado por el técnico rosarino.

"Hay grandes goleadores, delanteros que garantizan goles, que vienen de marcar en Europa y que seguro van a marcar en el campeonato", asegura Gabriel Omar Batistuta, máximo goleador de la historia de Argentina, autor de los tantos que llevaron a la albiceleste a ganar la Copa América en 1991 y 1993. No miente. El torneo huele a gol. Por supuesto lo tiene Argentina, con Messi, Agüero y Tévez (entre los tres, 70 goles entre la Liga y la Premier), además de Higuaín, Pastore y Di María. Tiene gol Brasil, con Neymar y Fred; en Uruguay aparece un tridente impresionante, con Luis Suárez, Forlán y Edinson Cavani, que en calcio ha sumado 26 dianas con el Nápoles, y también impone Colombia, que cuenta con Hugo Rodallega, que con sus goles ha conseguido mantener en la Premier al Wigan y, por supuesto, Falcao.

El delantero del Oporto viene de batir el récord (17 goles en la Liga Europa) en competiciones europeas en una temporada que tenía Jürgen Klinsman (con el Bayern Múnich en la UEFA de la campaña 1995-96). Incluso equipos menores tienen en plantilla futbolistas de olfato. Tal es el caso de Ecuador, con el granota Felipe Caicedo (13 goles en la Liga), de Paraguay (Lucas Barrios cerró el año en la Bundesliga con 16 tantos) y de Mauricio Saucedo, en Bolivia. Y por supuesto todo el mundo mira también a Alexis Sánchez, el atacante por el que suspira Guardiola para el Barcelona y que ha explotado con el Udinese.

Un simple recuento entre los delanteros que configuran las plantillas de los 12 equipos que desde ayer compiten en la 34ª edición de la Copa América permite adivinar la cantidad de dinamita. Entre todos han sumado casi 500 goles entre sus respectivas Ligas. El hecho de que la mayoría de artilleros disputen las mejores competiciones europeas (en España, Italia, Alemania e Inglaterra) habla del valor de los nueves.