Aprobados para 'sin papeles'
Una banda vendía certificados de estudios a inmigrantes chinos para regularizar su situación en España
Un antiguo empleado de una academia de idiomas había ideado una fórmula para ganarse la vida. Se dedicaba a falsificar certificados de notas, con los que inmigrantes chinos lograban regularizar su situación en España sin levantar sospechas. Así al menos lo ha hecho hasta que ha sido detenido por los agentes de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, así como a los otros 19 integrantes de la banda, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El juez ha ordenado el ingreso en prisión de tres de los arrestados, que actuaban como cabecillas de la banda.
Los agentes iniciaron las pesquisas a raíz de la denuncia de la dueña de una academia de idiomas, que avisó de la falsificación de certificados de estudios de su academia. Los documentos estaban siendo presentados ante organismos oficiales para lograr los permisos de residencia como estudiante y poder quedarse así en Madrid.
El juez ha ordenado el ingreso en prisión de tres de los arrestados
Los agentes del Grupo V de Extranjería, especializado en temas relacionados con chinos, localizaron a dos ciudadanos de origen oriental, a los que se les detuvo por un delito de falsedad documental. Tras una larga y complicada investigación dado lo cerrado de la población china, los policías localizaron al resto de la organización y comprobaron cómo actuaban, además de averiguar el lugar en el que se realizaban las falsificaciones, según destacaron fuentes de la investigación.
Los policías terminaron la operación con la detención de otras 17 personas, de las que una era de nacionalidad española. Entre ellos estaba el extrabajador de la academia de idiomas. Cinco de los acusados se encargaban de falsificar los certificados, mientras que otro actuaba como intermediario con las personas interesadas en la regularización. Para ello, cobraban 800 euros por cada documento falsificado. Siempre captaban a sus clientes a través del boca a boca. En la mayoría de las ocasiones la información procedía de una gestoría a la que los ciudadanos chinos acudían para informarse de los requisitos que necesitaban para renovar su tarjeta de residencia en el territorio español, según explicaron ayer fuentes policiales.
Tras conseguir la pertinente orden judicial, los agentes del Grupo V de Extranjería registraron tres domicilios en las calles de Alfonso Rodríguez Santamaría (Chamartín), Nuestra Señora de Valverde (Fuencarral-El Pardo) y Felipe Castro (Usera). En esas viviendas, los investigadores hallaron numeroso material entre el que destacan dos equipos informáticos, una impresora digital de fotografía, diversos teléfonos móviles, documentación falsa, sellos y tampones y dinero en efectivo.
Las investigaciones permanecen abiertas, ya que los policías creen que puede haber bastantes más personas implicadas en la red o que hayan conseguido de forma ilegal su tarjeta de residencia. El número de implicados puede llegar a más de un centenar, por lo que podría haber más detenidos en los próximos días. Al frente de todos ellos estaba M. A. R., de 47 años. El resto rondaba los 20 años.
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