La patronal confía en el nuevo contrato de Mercedes "por el bien de Álava"

La patronal alavesa SEA espera que, "por el bien de la provincia", el ensamblaje del nuevo modelo de furgoneta de Mercedes, la VS20, quede en manos de la planta que la multinacional alemana del automóvil tiene en Vitoria. "Esperemos [que las negociaciones] lleguen a buen puerto", teniendo en cuenta la incidencia que ello tendría en las empresas y la economía alavesas, recalcó ayer Juan Ugarte, secretario general del SEA.

Ugarte recalcó que la patronal tiene constancia de que otras fábricas del grupo alemán están compitiendo para hacerse con esa carga de trabajo. El contrato garantizaría una década más de empleo de calidad a los casi 3.000 trabajadores de la fábrica y supondría un balón de oxigeno para la industria auxiliar del sector de automoción. Conseguirlo "requiere una serie de condiciones que la dirección de Mercedes está poniendo sobre la mesa, tanto a los trabajadores como a los proveedores", recordó. La multinacional alemana se resiste a dar un sí hasta llegar a un acuerdo con los representantes de la plantilla que incluya mayor flexibilidad laboral a un menor coste. Fuentes del comité de empresa, en el que UGT tiene ocho delegados y ELA siete, no quisieron adelantar ayer su postura. El viernes tienen previsto ofrecer una rueda de prensa.

Mientras, los responsables del SEA, que ofrecieron una rueda de prensa ayer en Vitoria, no quisieron pronunciarse sobre la batalla interna en la patronal vizcaína Cebek, con dos candidatos en pugna para presidir Confebask. "Es un tema interno de Cebek. Cuando tenga claro lo que quiere hacer, lo tendrá que plantear en Confebask. Y entonces las tres territoriales lo tendremos que consensuar", explicó el presidente del SEA, Juan José Azurmendi.

Ugarte añadió que, en todo caso, al consejo de Confebask llegará solo un nombre. "Entonces nos tocará valorar si nos sentimos representados o no por el candidato que se pone sobre la mesa", concluyó.