Para reformar la Ley Electoral
Existe un clamor mayoritario contra la actual ley electoral. El movimiento 15-M lo ha vuelto a sacar del armario de las reclamaciones de los partidos pequeños, pero ahora la propuesta ha prendido en la gente: el actual mecanismo de reparto de escaños es absurdo.
La clave está en la Constitución, que establece un sistema proporcional, y marca a la provincia como circunscripción electoral. Cambiemos eso: el sistema puede ser proporcional o mayoritario. Vamos a debatirlo.
Si se mantiene el sistema proporcional, la circunscripción electoral debería dejar de ser la provincia, concepto administrativo que debería desaparecer.
Si se opta por un sistema mayoritario, las listas deben ser abiertas: cualquier ciudadano debería tener la oportunidad de ser candidato en su circunscripción, sin que tenga que someterse al corsé de un partido político. Y esto se parecería mucho a la democracia real que reclaman en las plazas.