El PSOE busca chafar la mayoría de Zoido

Un concejal separa al sevillano Juan Espadas de ser o no alcalde. Son los datos de las encuestas del PSOE (los tracking) de hace una semana. Roza el concejal 14 y ese número que sigue al 13 y precede al 15 significa que el PP volvería a ganar en Sevilla, pero no conseguiría mayoría absoluta. Es a lo que aspiran ya los socialistas sevillanos, desanimados por los sondeos adversos, los propios y los ajenos. Superar en sufragios al aspirante del Partido Popular, Juan Ignacio Zoido, se les antoja una meta imposible. Perder en votos pero lograr el concejal 14 se saborearía como un triunfo en el PSOE. Eso significaría reeditar el pacto con Izquierda Unida que mantendría sus actas. La mayoría absoluta está en 17 escaños. El domingo se sabrá la respuesta de los sevillanos a la pregunta que el lunes pasado hizo en esta ciudad el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero: "¿Vais a dejar que gane el PP en la tierra de Felipe González?".

El PSOE andaluz eligió ayer para el cierre de campaña el pabellón del Centro Deportivo de Amate, un distrito donde hace cuatro años lograron el 62% de los votos, pero con una abstención del 53%. Mil votos afirmó el lunes pasado Espadas que le faltaban para el 14 (esto no lo dijo), de ahí que estos días hayan intensificado el contacto directo, el puerta a puerta que tan buenos resultados les ha dado en el pasado. Y para abrochar 15 días de petición de voto, el PSOE tiró de su mejor activo electoral, el expresidente Felipe González. Un pabellón sin rebosar lo acogió con locura, si bien es verdad que era medio pabellón, porque el escenario colocado a mitad de la cancha achicó mucho el espacio. Que en la tierra de Felipe González, como diría Zapatero, el PSOE tenga que empequeñecer el recinto dice algo de cómo está el PSOE. El segundo mejor activo del PSOE en Sevilla, Alfonso Guerra, cerró en Asturias, aunque va en el último puesto de la lista de Espadas.

Felipe González exprimió a fondo el paisanaje. Dijo que su "obsesión" cuando con 40 años llegó a la presidencia del Gobierno fue que Andalucía no se quedara descolgada del desarrollo, como ocurrió con el sur de Italia. González como el día anterior en Jaén, pidió el voto para "que gane Andalucía, por eso quiero que gane Espadas". "Lo que no puede ser es que aquí en Cerro no vote el 50%, nos tenemos que movilizar en serio", subrayó.

Aunque habló con cierto desdén de los reconocimientos personales, González aprovechó para recordar que aun siendo de Sevilla no había recibido ninguna distinción del Ayuntamiento. El equipo del alcalde saliente, Alfredo Sánchez Monteseirín, lo ha intentado en varias ocasiones, pero siempre se ha topado con el mismo problema, la falta de unanimidad por el bloqueo de los populares a apoyar su nombramiento como hijo predilecto.

Como ha venido haciendo durante toda la campaña, Griñán negó que estas elecciones fueran unas primarias para él o para el líder del PP, Javier Arenas, si bien en todos sus actos aprovecha para hablar de la Andalucía que "han hecho" los socialistas. Reprochó a los populares el no haber presentado propuestas concretas en esta campaña y centrar todo su discurso en arremeter contra el PSOE. También se esforzó en quitar la etiqueta de partido de centro que esgrime el PP. "Es incompatible ser de centro y votar en contra de todas las leyes que han desarrollado el Estado de Bienestar", aseguró. "Es derecha pura y dura, se lo recordamos y dicen que les insultamos", subrayó.

Griñán aseguró que de la crisis solo se saldrá desde la socialdemocracia y aunque mostró su comprensión con el movimiento 15-M, opinó que "indignarse no puede ser solo protestar", porque así no se resuelven los problemas. "Hay que votar al PSOE aunque sea con enfado", enfatizó el líder del PSOE, que recordó que "un solo voto" puede hacer alcalde a Espadas. Sevilla es la ciudad que más ha visitado Griñán en la campaña.

Espadas también hizo un guiño a las personas que se concentran en las Setas de Sevilla, obra cumbre del alcalde saliente con una altísima factura, reclamando otra manera de gestionar la política. El candidato aprovechó su último mitin para dar un repaso rápido a sus promesas electorales, pedir que se acuda a votar -"solo cuando los ciudadanos no hablan, gana la derecha, ese es el drama"- y para arremeter contra su adversario, al que comparó con el anterior presidente popular. "El PP e IU piden los votos de los socialistas porque todos los votos de Sevilla son socialistas", dijo Espadas, quien pidió a los sevillanos que no permitieran que la "foto de Aznar" entre en el despacho del alcalde de Sevilla. Él prometió llevar la de Felipe González.