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Musikene mantendrá los recortes hasta que sea "gestionable"

La directora recalca que el centro está sobredimensionado

Mikel Ormazabal

Lejos de rebajar la tensión que rodea a Musikene, las explicaciones dadas ayer por la dirección del Centro Superior de Música del País Vasco acabaron por exasperar a un buen número de sus alumnos, que ayer se presentaron con carteles de protesta en una comparecencia de los responsables del Conservatorio ante los periodistas y terminaron por abroncarles al grito de "dimisión, dimisión". La coordinadora general de Musikekene, Carmen Rodríguez Suso, y parte de su equipo, optaron por dar por finalizada la rueda de prensa cuando arrecieron los abucheos de los estudiantes.

Al día siguiente de que los 13 dimisionarios del equipo directivo, alumnos y profesores acusaran a la cúpula de Musikene de una nefasta gestión del centro, entre otras críticas, Rodríguez Suso explicó que el conflicto está motivado por la necesidad de recortar gastos y reducir la plantilla para "redimensionar y racionalizar el centro" para "hacerlo gestionable".

En su primera comparecencia pública, y acompañada por el director académico, Juan Carlos Pérez, y el responsable de la gestión económica, Carmelo Labirua-Iturburu, la coordinadora general salió al paso de la versión ofrecida por los 13 miembros del equipo directivo que han dimitido recientemente y ahora exigen su marcha para que Musikene "recupere el prestigio".

Rodríguez Suso defendió su gestión y los ajustes económicos que está aplicando para "garantizar la viabilidad" de Musikene, un centro que "ha vivido por encima de los parámetros de otros conservatorios". Incluso, desveló que la portavoz de los dimisionarios, Margarita Lorenzo, subdiretora de Ordenación Académica, llegó a reconocerle en privado que Musikene "vivía en medio de un lujo asiático" y "había que recortar".

La responsable del centro reconoció que sigue las instrucciones del Departamento de Educación, según las cuales los presupuestos de los próximos ejercicios irán reduciéndose gradualmente hasta lograr el "redimensionamiento". La consejería considera desproporcionado que Musikene ofrezca más plazas que el centro homólogo de Cataluña, con más del triple de habitantes que el País Vasco.

"El coste por alumno [en Musikene] es superior en algo más de 10.000 euros por año que el siguiente conservatorio español del mismo tipo", aseguró Rodríguez Suso, quien recalcó que no piensa dejar su cargo. Lamentó, eso sí, que las protestas y la agitación suscitadas se hayan hecho coincidir con la campaña electoral con el propósito de obtener una mayor repercusión pública.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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