El ciclo del Barça
A un punto de ser campeones, los azulgrana rozan la quinta de las últimas 10 Ligas - El Madrid se libera - Casi descendido el Hércules, otros 10 equipos siguen expuestos a bajar a Segunda
Como si se tratara de un homenaje póstumo al genio Severiano Ballesteros, sus dos equipos más queridos, el Racing y el Barcelona, cumplieron sus sueños: casi la permanencia del conjunto cántabro y prácticamente el alirón del catalán. Tras superar a un Espanyol poco fiero, el Barça está a un punto de ser campeón, tal vez mañana si el Madrid no gana al Getafe, tal vez el miércoles ante el Levante, en el estadio Ciutat de València, en un guiño al conjunto de Frank Rijkaard, coronado en él en 2005. La continuidad de un estilo perfeccionado por la meticulosa dirección de Pep Guardiola, que sumará un pleno de tres Ligas en tres cursos. De confirmarse, el Barça habrá ganado cinco de las últimas 10, repartiéndose las otras cinco el Madrid (tres) y el Valencia (dos). Es el triunfo de un modelo.
El Depor tiene el peor calendario: visita San Mamés y el Camp Nou y recibe al Valencia
Guardiola dio incluso unos minutos a Abidal, recuperado del tumor en el hígado, y el Barça jugó ya con la mirada en la final de la Champions, el día 28 en Wembley, ante el Manchester United, que ayer también rozó, tras doblar al Chelsea, su 19º título de Liga, uno más de los coleccionados por el Liverpool.
En cuanto se aleja del cuerpo a cuerpo con el Barça, el Madrid se libera de tal manera que aplasta como visitante a sus ilustres anfitriones, ya sean el Valencia en Mestalla o el Sevilla en el Sánchez Pizjuán, acribillados por seis tantos cada uno en sus dos últimas salidas. Menos mourinhizado, el Madrid suelta lastre y se acerca, con 87 tantos, a la fertilidad atacante azulgrana (91). Curiosamente, la mayor diferencia se marca en el terreno defensivo, en el que el Barça ha encajado 12 goles menos. En los choques directos, la aplastante victoria azulgrana en el Camp Nou (5-0) fue tan disuasoria que el empate (1-1) del Bernabéu fue celebrado por los madridistas como un triunfo.
Individualista por antonomasia, Cristiano Ronaldo sí va a competir por el Trofeo Pichichi hasta el final. Las cuatro dianas al Sevilla le permiten, con 33, sacar varios cuerpos a un Messi menos acertado en las últimas jornadas (31). Los dos han salido beneficiados de ese mano a mano de los últimos años, pero sobre todo CR7, que casi dobla los goles en su último curso en el United (18). A distancia sideral de los dos gigantes, los puestos de la Champions están casi asegurados para el Valencia y el Villarreal. El Athletic, el Sevilla, el Atlético y el Espanyol (Racing y Mallorca con opciones muy remotas) optan a la Liga Europa.
Todo el drama se deja para la cola. Djukic, el técnico del Hércules, dio por hecho en Twitter el adiós a la categoría de su equipo, probable acompañante de un Almería ya descendido. Nadie quiere ser el tercer invitado, un puesto mucho más disputado que en la campaña pasada: el Valladolid fue 18º con 36 puntos, cantidad ya superada por el actual antepenúltimo. A falta de tres jornadas, hasta 10 equipos siguen expuestos a ocupar esa tercera plaza. Especialmente espinoso es el calendario del Depor: visita San Mamés y el Camp Nou y recibe al Valencia, un rival odiado en Riazor desde que, en 1994, el portero González parara un penalti a Djukic y privara al cuadro gallego de su primera Liga.
Osasuna dio un golpe de efecto con una sorprendente remontada ante el Zaragoza en La Romareda. Complica mucho la vida al equipo aragonés y aprieta aún más la clasificación. Con 43 puntos, el Sporting, el Levante y el Racing solo están a cuatro del descenso. Todos, a tiro de piedra, si bien el Málaga sigue subiendo. Pese a ser el más goleado (64 tantos, tres más que el Almería), ha crecido gracias a la apuesta atacante de su entrenador, Manuel Pellegrini, y al acierto goleador de Baptista (ocho), mano de santo cuando regresó de la lesión, y Rondón (14).
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