Los sindicatos culpan al Gobierno
El récord del paro marca el Primero de Mayo - UGT y CC OO cuestionan la eficacia de la reforma laboral y piden alternativas financieras y fiscales de izquierda para salir de la crisis
Las sombras de los casi cinco millones de parados que tiene España marcaron ayer los ánimos de la principal manifestación del Primero de Mayo, que este año se celebró en Valencia. CC OO y UGT, los dos sindicatos mayoritarios, emplearon la fiesta del Día del Trabajo en cuestionar la eficacia de la reforma laboral aprobada en 2010 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y en reclamar un nuevo marco financiero. "Decían que se iba a crear un ambiente favorable a la creación de empleo y el paro ha seguido aumentando", recordó el secretario general de UGT, Cándido Méndez, "decían que con estas medidas se inyectaría confianza, y el desánimo sigue; decían que de manera directa esta reforma laboral iba a mejorar la contratación indefinida y un año después hay 130.000 contratos indefinidos menos".
El líder de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, por su parte, vinculó el aumento del número de parados a los recortes laborales: "Los parados no caen de los árboles". Y por eso aseguró que la manifestación del Primero de Mayo estaba más motivada que nunca: "Tenemos 4.910.200 razones más para reclamar soluciones alternativas", dijo en referencia al número de desempleados que ofreció la última Encuesta de Población Activa (EPA), la del primer trimestre de 2011, publicada el pasado viernes.
Méndez y Toxo recorrieron las calles de Valencia bajo un sol primaveral al tiempo que otras 80 manifestaciones se celebraban en otros puntos de España. Casi 10.000 personas siguieron su marcha reivindicativa de Valencia. El lema del encuentro, Ocupación con derechos, contra los recortes sociales, dejó claro desde el principio por dónde iban sus críticas. "Que asuman que ha sido un fracaso, que ha sido un error, que ha sido una injusticia, que ha aumentado el paro y que ese no es el camino", manifestó Méndez.
El líder de UGT cuestionó la forma unilateral en la que se aplicaron las reformas: "Hace un año la imposición ganó a la negociación por uno a cero, ahora la realidad le ha ganado a la imposición por goleada". Los agentes sociales sí pactaron con el Gobierno la reforma de las pensiones y discuten ahora cambios drásticos en la negociación colectiva.
"Puede haber una segunda onda de choque después de las elecciones del 22 de mayo", añadió el secretario general de UGT. Una tentación reformista que podrá afectar, dijo, a servicios fundamentales, como la sanidad o la educación. Toxo, por su parte, incidió en la necesidad de una reforma fiscal para que contribuyan más a la recuperación los "que más se han beneficiado de esta etapa larga de bonanza económica". "Desde la izquierda se espera un discurso alternativo al pensamiento único", se quejó el secretario de CC OO. "Caben, desde posiciones de progreso, alternativas económicas, fiscales, del sistema financiero, sociales y laborales, distintas", aseguró.
Las manifestaciones más concurridas se celebraron en Madrid y Barcelona, ciudades donde se concentraron decenas de miles de personas. Los secretarios generales de CC OO y UGT en Cataluña, Joan Carles Gallego y Josep Maria Álvarez, aprovecharon la cita para criticar los recortes anunciados por el Gobierno catalán, informa Clara Blanchar. Por la tarde, una marcha alternativa a la de los sindicatos mayoritarios discurrió por los barrios más distinguidos de Barcelona, la zona alta de la ciudad. Un grupo de personas quemó un muñeco con la cara de Artur Mas, el presidente de la Generalitat, en la calle donde vive. Tras varios incidentes, los Mossos d'Esquadra detuvieron a una docena de manifestantes.
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