Telecinco apuesta por la alta definición

Telecinco se apunta a la tecnología más moderna del sector audiovisual. La cadena apuesta por producir contenidos en alta definición "en toda la cadena de valor" para ofrecer a los espectadores productos con la mejor calidad de imagen y sonido, según anunció ayer su consejero delegado, Paolo Vasile. El plan incluye también suministrar contenidos a la carta para su difusión en Internet, entornos móviles y en todo tipo de dispositivos de banda ancha. Menos firme es su compromiso con la tecnología tridimensional. La cadena se mantendrá "atenta" a la evolución del 3D, aunque solo actuará cuando vea "un horizonte de negocio y espectadores interesados".

De momento, los seguidores del grupo Gestevisión Telecinco (que a partir de ahora se denomina Mediaset España Comunicación) tienen una variada oferta para elegir. "La familia crece y sigue creciendo", apuntó Vasile durante la Junta de Accionistas celebrada ayer. Tras los acuerdos de fusión firmados a finales de 2010 con PRISA (editor de EL PAÍS), la compañía explota seis canales: Telecinco, Cuatro, FDF, La Siete, Boing y Divinity y este año nacerá otro enfocado al público masculino. Los dos múltiples (con cuatro canales cada uno) se completan con Canal + Dos.

La empresa matriz pasa a llamarse Mediaset España Comunicación

Dentro del proceso de sinergias, la compañía ha culminado la integración de las redacciones de Informativos Telecinco y Noticias Cuatro. Ambos trabajarán con los mismos medios, pero "conservarán su independencia editorial". En 2010 el grupo registró una cuota de pantalla del 25,5%. El Mundial de Fútbol de Sudáfrica aportó a Telecinco 0,42 puntos de cuota. Otros formatos de gran tirón, como El programa de Ana Rosa y Sálvame, son para Vasile "de valor insustituible".

Ante los frustrados procesos de fusión iniciados por otros operadores, el consejero delegado de Telecinco pidió "calma y juego limpio" a los competidores. Y más en tiempos de crisis. Aunque para la cadena 2010 "no ha sido un mal año", tal y como reconoció su presidente, Alejandro Echevarría, quien recordó que sigue siendo la primera televisión privada en términos de audiencia y rentabilidad.

Los datos así lo avalan: los ingresos publicitarios brutos crecieron un 34,8% (hasta los 834 millones de euros), en parte gracias al apagón publicitario de TVE (Telecinco acaparó el 35% de los anuncios liberados), y el beneficio de explotación aumentó un 78,7% (hasta 219 millones). Los costes se dispararon por la compra de los derechos del Mundial y el canon (3% de los ingresos) para financiar TVE.