Aguirre ofrece el Bachillerato de excelencia a todos los centros

El Bachillerato de excelencia anunciado por la presidenta regional, Esperanza Aguirre, se extenderá en 2012 a todos los institutos que lo pidan, como ha ocurrido con los colegios bilingües. Así lo anunció la presidenta durante un discurso en el Foro Abc, celebrado ayer al mediodía, donde aseguró que el próximo curso los estudios para los alumnos con mejores calificaciones estarán en pruebas.

Aguirre defendió su propuesta, a la que denominó "Bachillerato de exigencia", para distanciarse de las críticas que ha recibido el proyecto, especialmente de la oposición (PSM e IU) y las organizaciones laicas, que aseguran que es un modelo "segregador" y "elitista", además de que consideran que deberían tener prioridad otros problemas educativos.

La presidenta justificó su proyecto como una "oportunidad" para "los alumnos más capaces, los que quieren dedicar más tiempo a los estudios, los que están volcados en el esfuerzo y en el mérito" tengan oportunidad de seguir mejorando. "Con una mayor exigencia, no les vamos a regalar nada", zanjó.

San Mateo, en pruebas

La experiencia arrancará el próximo septiembre en pruebas en el instituto San Mateo y, una vez evaluada, se incorporará el resto de institutos, según la Consejería de Educación. A partir de 2012, podrán existir otros centros dedicados exclusivamente a ofrecer este tipo de estudios o que los institutos incorporen aulas de excelencia junto al Bachillerato habitual.

Además, el San Mateo se utilizará como centro de formación de los profesores que vayan a impartir el Bachillerato de excelencia en otros centros y que cobrarán un complemento a su sueldo, que Educación aún no ha detallado. La preparación de docentes la harán maestros seleccionados por una comisión de profesores universitarios que designará la Consejería de Educación, entre aquellos que lo deseen.

Para acceder al Bachillerato de excelencia, los alumnos deberán haber superado previamente el examen para los premios extraordinarios de Secundaria, que servirá para evaluarlos. Se trata de una prueba voluntaria que realizan estudiantes con una nota media superior al ocho y más de un siete en la prueba de Conocimientos y Destrezas Indispensables de Secundaria. En Madrid hay unos 3.000 alumnos que podrían presentarse a esa prueba, según la Consejería.