La frenética pasarela del Mundial
España, que aún debe asegurarse su presencia en la Eurocopa 2012, dedica la mañana de ayer a actos publicitarios mientras Del Bosque pide "más exigencia en el día a día"
Ganar la Eurocopa de 2008 y el Mundial de 2010 ha dado a La Roja tanto prestigio como una actividad social frenética. Un ir y venir que ayer quedó patente. La cita para los jugadores internacionales de Vicente del Bosque era a la una de la tarde, en la Ciudad del Fútbol, con vistas a los próximos encuentros clasificatorios para la Eurocopa de 2012 -este viernes, contra la República Checa, y el próximo martes, frente a Lituania-, pero antes la mañana madrileña de los campeones europeos y mundiales dio para mucho.
Iniesta y Villa se pasaron por el Museo de Cera, en el que descubrieron sus muñecos. Torres recogió la insignia de oro y brillantes de Fuenlabrada e inauguró el polideportivo que lleva su nombre. Silva, Ramos, Arbeloa, Reina, Alonso, Villa, Capdevila, Marchena, Llorente y Javi Martínez, que vuelve a la convocatoria, se pasaron por Chocron Joyeros, en la calle Príncipe de Vergara, y recogieron un reloj de oro rosa, premio de la federación por la victoria en el Mundial. Allí estuvo el cuerpo técnico de la selección, con Del Bosque a la cabeza, que lució un espectacular reloj y así, simbólicamente, marcó los tiempos de La Roja, consciente de que se deben atender en su necesaria medida los compromisos federativos, pero sin olvidar la razón de ser del equipo nacional: hay partidos, no hay tregua.
Torres: "Con el éxito te acomodas. Por suerte, tenemos el reto de encadenar tres títulos"
Iniesta: "Si el Barça se ve o no cuatro veces con el Madrid en abril no importa ahora"
"¿Cómo ha cambiado su vida desde que es campeón del mundo?", preguntó Anne Igartiburu al seleccionador. "Nos exige más en el día a día y en el futuro", soltó Del Bosque, siempre en su sitio, consciente de que, por lo que a él y a la selección incumbe, esta semana no es precisamente de vacaciones. Puede que pare la Liga y el altavoz de Madrid y Barcelona, pero España encarará el viernes a la República Checa, un rival al que cargó de importancia: "Es un referente en los últimos años. Tiene jugadores muy buenos y nos exigirá mucho".
"Dependemos de nosotros mismos" para acudir a la cita de Polonia y Ucrania, recordó el técnico, que instó a sus futbolistas a no olvidarse de lo que representa ponerse la camiseta de La Roja: "Deben disfrutar de lo que significa representar al campeón del mundo y, al tiempo, ser conscientes de la responsabilidad".
No parece que lo hayan olvidado los futbolistas, que, muy al contrario, llegaron con la lección aprendida: "Hemos de pensar en la selección porque tenemos dos partidos de clasificación muy importantes. Si ganásemos los dos, tendríamos más de pie y medio en la Eurocopa", aseguró Villa en el Museo de Cera. El Guaje, que batirá el récord de goles de Raúl en la selección tan pronto marque uno más -lleva 44-, insistió en que cuanto antes sumen los puntos mucho mejor. "Menos sufrimiento. Hay que ir partido a partido. Estos dos serán complicados, pero nuestra intención es ganarlos".
Una hora después apareció Iniesta, que renunció a pensar en los duelos con el Madrid en abril, en la Liga, en la Copa y quizás también en semifinales de la Champions. "Lo trascendente para nosotros son los dos partidos clasificatorios para la Eurocopa. Es nuestro objetivo. Luego, ya veremos qué pasa. Si nos vemos cuatro veces con el Madrid en abril o no es algo que no nos concierne ahora", dijo.
La selección se concentró ayer en la ciudad deportiva de Las Rozas, en la que se ejercitó por la tarde, durante casi una hora y media, y volverá a hacerlo hoy. Los jugadores se vieron sometidos a un control antidopaje, una práctica habitual ante los partidos de competición oficial.
Desde que ganó el Mundial, en junio de 2010, España ha perdido estrepitosamente contra Argentina (4-1) y Portugal (4-0), pero ha solventado los tres partidos europeos de manera más que solvente. "Lo difícil en el fútbol, a nivel de selecciones, es aprender a ganar", declaró ayer Torres. "Después de muchísimos años de decepciones, España ha aprendido a ganar. Había otra ambición, otro reto, que era el Mundial, y también lo conseguimos. Muchas veces, con el éxito te acomodas, pero, por suerte, hay otro reto, que es conseguir encadenar Eurocopa-Mundial-Eurocopa, algo que nunca antes nadie ha hecho", añadió el fuenlabreño; "no hay nada más bonito que romper la estadística y la historia. Eso es lo que tenemos en la cabeza y para eso están el partido del viernes y el del martes, para conseguir la clasificación cuanto antes y poder empezar a hablar de ganar otra vez la Eurocopa".
La presencia de la selección en Granada, ante el conjunto checo, obedece tanto a la voluntad de llevarla a todos los rincones del territorio español como a la intención de mejorar los ingresos con el reclamo del título mundial. En este sentido, la federación renegocia contratos de patrocinio con la misma solvencia con que atrae la atención: el Ayuntamiento de la ciudad andaluza desplegará una bandera española de mil metros cuadrados.
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