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El sector rebate los datos del Gobierno y exige que se vuelva a pescar caballa

El ministerio promete estudiar las cifras de capturas enviadas por los afectados

El sector pesquero del arrastre está dispuesto a radicalizar sus protestas contra el cierre desde la semana pasada de la pesquería de caballa. Pero aún confía en ganar la batalla sin tener que bloquear los puertos del noroeste cantábrico después de que el Gobierno, ayer, se comprometiese a revisar los datos sobre las capturas en lo que va de año y abriese la posibilidad de revocar su decisión de paralizar desde ya la extracción de caballa. "Parece que están dispuestos a reconsiderarlo", aseguró ayer el portavoz de la asociación coruñesa PescaGalicia, Torcuato Teixeira, tras reunirse representantes del sector gallego con el delegado del Gobierno en Galicia, Antón Louro. Ante su sede, se dieron cita más de 300 personas de este sector para presionar al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino a rectificar una decisión que claman como injusta.

"Hay esperanza de que cambien las cosas", afirma un portavoz del arrastre

La solución del conflicto requiere un acuerdo sobre la guerra de cifras, clave en este asunto: el departamento de Rosa Aguilar cerró la pasada semana la pesca de caballa por considerar que ya se capturó el 90% de la cuota asignada por la Unión Europea para 2011 (6,3 millones de kilos). El sector, que aún está cumpliendo con su obligación de remitir sus datos sobre extracción, asegura que sólo se consumió el 55% del tope. "La caballa es una pesquería estacional; se nos está yendo y no vale reservar 2,2 millones de kilos de capturas para el segundo semestre del año, porque no habrá", recordó ayer el portavoz del sector gallego.

Bajo pancartas que reclamaban la dimisión de la ministra o contra el Gobierno, los representantes de sector, en su concentración de ayer, reivindicaron "el derecho a trabajar". Prohibir la pesca de la caballa, de la que dependen 110 barcos del noroeste cantábrico, supondría la pérdida de un millar de empleos directos y otros siete mil indirectos. Cifran en unos tres millones de euros las pérdidas para el sector "Hay esperanza de que cambien las cosas y que el ministerio contraste rápidamente los datos", aseguraron los representantes de la flota tras entrevistarse con Louro.

A la concentración de ayer se sumaron políticos del PP y del BNG, mientras la Consellería do Mar, que también respalda las protestas de la flota del arrastre, instó al ministerio a defender los intereses del sector ante la UE, que permite, remarcó, muchas más capturas a los países del Norte que a los del Cantábrico noroeste "cuando el tipo de pesca que realizan no tiene nada que ver". El ministerio, que reabrirá la pesquería de caballa si los datos demuestran que aún no se consumió el cupo para este año, insiste en que su decisión es consecuencia de que en 2010 se superó en casi un 80% el tope marcado por la UE, lo que amenaza con prohibir para siempre esta pesquería por sobrepesca.

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