El orden del Racing condena al Almería

Parece el Almería condenado a su mala suerte. Acabó empatando un partido que se le puso de cara a los 17 minutos, cuando el Racing se quedó con un jugador menos por expulsión de Henrique. Luego recibió el golpe del gol de Colsa y todavía su portero Diego Alves le metió en el encuentro al detener un penalti a Adrián (ha parado 10 de los 17 que le han lanzado entre la temporada pasada y esta). En un segundo tiempo pleno de fe y raza, el Almería metió al Racing en su área y gozó de hasta cinco ocasiones claras de gol, además del tanto de Crusat. Pero no ganó.

Tanto esfuerzo solo le valió un punto, salvado por el orden de un conjunto cántabro al que Marcelino le ha cambiado la cara. La igualada apenas sirve al cuadro andaluz y sí mantiene la buena racha del Racing, que ha sabido escaparse con destreza de la zona más delicada de la clasificación.

Las buenas maneras de este Racing se mostraron desde muy pronto, con un planteamiento valiente, con dos delanteros, y una salida al contragolpe mortífera. Adrián y Arana avisaron de las intenciones del equipo de Marcelino, que plasmó su superioridad con el gol de Colsa a pesar de jugar con un futbolista menos. Con orden y rigor táctico, apenas se notó la ausencia del defensa Henrique. Adrián, tras penalti a Ariel, muy activo, pudo sentenciar, pero salvó Diego Alves.

La parada del meta brasileño dio paso a un segundo tiempo de dominio absoluto del Almería. Las ganas de los andaluces por rebelarse ante su destino se plasmaron en un gol de Crusat y un puñado de ocasiones que no acabaron de cristalizar. Trabajó a destajo el Racing, con un espíritu de lucha encomiable, y se batió bien ante las acometidas del Almería, organizadas más con el corazón que con la cabeza, hasta el punto de que Alves acabó subiendo a intentar rematar un córner en el minuto 94.

Aun así, Toño estuvo a un gran nivel en dos remates de Michel y Uche, ocasiones que provocaron la desesperación de Oltra, que vio, sancionado, el partido desde la grada. El Racing, metódico y trabajador, se llevó un punto que deja muy tocado al colista.