El pleno de Málaga se enreda

En campaña electoral casi nada parece tener límite, sobre todo si se trata de destapar las vergüenzas del adversario. El pleno de Málaga vivió ayer escenas de alta tensión a consecuencia de una moción de urgencia presentada por el PP en la que se instaba al concejal del PSOE Sergio Brenes a demoler cuatro escalones de acceso a la vivienda donde reside, que es propiedad de sus padres, que ocupan ilegalmente la acera. La moción resultaba algo insólita porque no está en la línea de la resolución de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) que el pasado 15 de febrero determinó actuar de manera subsidiaria y derribar los escalones, pero sobre todo porque dejaba a la vez de manifiesto la ineficacia de este área municipal, ya que se trata de cumplir una orden, el derribo de los escalones, adoptada hace nada menos que casi 16 años, el 12 de junio de 1995.

El concejal de Urbanismo, Manuel Díaz, explicó que hay que dar ejemplo en la aplicación de la legalidad, y especialmente cuando se trata de alguien como Sergio Brenes que "la exige con vehemencia" para los demás constantemente. Brenes es portavoz del grupo socialista en la comisión de Urbanismo. "No es ético", dijo Díaz, quien no reparó en que durante 16 años el consistorio no ha hecho nada para cumplir la orden de demolición.

Para el PSOE la moción del PP era indigna y obedecía a un intento de distraer la atención porque en el pleno se iba a debatir una propuesta de la oposición para rescatar la contrata de la piscina de Puerto de la Torre, después de que un juzgado haya abierto una investigación por un presunto cohecho en el concurso y de que el concesionario haya incumplido el pliego de condiciones al no ejecutar ninguna de las obras de equipamiento complementario contempladas en el contrato. La portavoz del PSOE, Begoña Medina, dijo a Díaz que lo que no es ético es comprar un coche al constructor al que se le adjudica un concurso, y que tenía como socio a un amigo íntimo del concejal de Urbanismo sobre el que ha declarado que le animó a concursar.

El PSOE se negó a votar la moción del PP aduciendo que no se puede presentar en pleno una propuesta así. Ante la trifulca, el alcalde, Francisco de la Torre, pareció verse obligado a justificar. "Ha quedado claro que el señor Brenes no es el titular de la vivienda, pero el planteamiento de la moción está hecho en términos positivos, de ofrecimiento de apoyo para que se garantice el cumplimiento de la legalidad a través de él", expuso.