El Parlament catalán insta a alcanzar la reciprocidad entre TV3 y Canal 9

El Parlament catalán aprobó ayer un acuerdo de mínimos en favor de un acuerdo entre la Generalitat catalana y valenciana para que todos los respectivos canales de radio y televisión "lleguen a ambos territorios con normalidad". La lectura de la resolución, avalada por todos los grupos, llega después de la polémica que ha provocado la decisión del Consell de cerrar los repetidores de TV3, que ha desencadenado un gran malestar entre los partidos catalanistas y la sociedad civil catalana.

Después de que la reunión de la Junta de Portavoces celebrada antes del pleno terminara sin acuerdo, los grupos lograron consensuar un texto de mínimos pocas horas después. Convergència i Unió (CiU) envió el martes un borrador de propuesta de resolución de tres puntos que fue reducida a un texto de mínimos.

Ridao achaca el cierre a una "razón política electoralista" de Camps

El primer punto de la propuesta planteaba que el Parlament reconociera el trabajo realizado por iniciativas privadas, especialmente la de Acció Cultural del País Valencià (ACPV), que han permitido la recepción de las emisiones televisivas y radiofónicas entre territorios "que comparten un mismo sistema lingüístico en ausencia del marco requerido" por la aplicación de la Carta Europea de las Lenguas Regionales o Minoritarias. El borrador inicial instaba también al Gobierno a facilitar la aplicación dentro del Estado de la citada carta.

El tercer y último punto recogía parte del texto que finalmente se aprobó. Abogaba por un acuerdo entre los dos Gobiernos a favor de la reciprocidad a la hora de recibir todos los canales que se emiten en ambas comunidades. Sin embargo, se eliminó la reclamación que se hacía a la Generalitat valenciana para que dejara sin efecto las sanciones económicas impuestas a ACPV, y pedía al Govern que priorizara la firma de este acuerdo con los medios técnicos que ambos Gobiernos tienen a su alcance.

La presidenta del Parlament catalán, Núria de Gispert, leyó la declaración institucional apoyada de forma unánime por todas las formaciones. Pese al aval conjunto, la portavoz parlamentaria de ERC, Anna Simó, y la de ICV-EUiA, Dolors Camats, reconocieron en un mensaje en su perfil de Twitter la debilidad del acuerdo.

Por su parte, la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, habló el martes con el presidente valenciano, Francisco Camps, para que en el futuro haya un acuerdo de reciprocidad, y le mostró su apoyo en la demanda de que la Comunidad Valenciana tenga un nuevo múltiplex. Sánchez-Camacho considera que el pacto de reciprocidad debe delimitar algunas cuestiones como la publicidad que genera la emisión de determinados eventos, como los partidos de fútbol, cuyos derechos televisivos se pagan en función de la audiencia de una determinada comunidad autónoma y no de más de una.

El debate sobre el cierre de los repetidores de TV3 en la Comunidad Valenciana llegó ayer también al Congreso de los Diputados. Allí, el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, destacó que el Gobierno "no tiene ninguna potestad" para garantizar las emisiones de TV3 en la Comunidad Valenciana, ya que este es un "problema de las comunidades". Jáuregui se manifestó así en respuesta a la pregunta del secretario general de ERC, Joan Ridao, quien se interesó por saber cómo contempla el Gobierno garantizar la continuidad de las emisiones de TV3 en el territorio valenciano.

Jáuregui indicó que la Generalitat valenciana tiene la facultad y los instrumentos para emitir TV3 porque tiene "canales suficientes", y "es tanto a la Generalitat de Cataluña como la valenciana a quien corresponde resolver la situación, no al Gobierno central". El ministro declinó hacer juicios sobre por qué se ha apagado la señal televisiva y solicitó que no se le atribuya al Gobierno un problema que es de las comunidades.

Ridao atribuyó la eliminación del canal a una "razón política electoralista" y acusó a Camps de cometer un "atentado arbitrario contra la libertad de expresión, de la lengua y de la cultura catalanas". Los diputados de ERC mostraron desde sus escaños carteles contra la supresión de TV3.