Fabricantes y concesionarios llevan su lucha a los precios

Las espadas siguen en alto en el mundo automovilístico español. A media mañana de ayer, la patronal de los concesionarios, Faconauto, convocaba a los medios de comunicación para exponer sus razones ante el cambio normativo. Entre otros argumentos, su presidente, Antonio Romero-Haupold, señalaba que supondrá un ahorro de costes para el comprador de entre 400 y 500 euros por coche, fundamentalmente por el ahorro de los costes de financiación de los automóviles no pedidos a la marca.

Pocas horas después, desde Anfac, la asociación que defiende los intereses de los fabricantes, no solo se rebatía este argumento, sino que se anunciaba un encarecimiento en el precio por los incrementos en las provisiones a las que verán obligados junto al aumento de los costes de comercialización.

Un planteamiento defendido también por el propio Ministro de Industria, convencido de que los fabricantes no asumirán los costes de los excedentes no vendidos.

Miguel Sebastián se reúne esta semana con ambas organizaciones y las comunidades autónomas con plantas automovilísticas.