ELA y LAB dan portazo a Lanbide que empezará a aprobar medidas el jueves

"Las ausencias no deben de ser objeto de noticia". La consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta utilizó ayer ese argumento para minimizar el efecto que va a tener la actitud de ELA y LAB en el funcionamiento ordinario de Lanbide. Los miembros de la mayoría sindical, pese a aceptar el nombramiento de los tres representantes que les corresponden, dieron portazo ayer al Gobierno y a la patronal en la primera reunión de su consejo de administración.

Sólo se trataba de oficializar la constitución del organismo, y los dos sindicatos nacionalistas habían barajado la posibilidad de acudir para levantarse un minuto después. Sin embargo, se limitaron a mandar una nota en la que reiteran que "dejan en suspenso" la participación en un órgano que ha sido diseñado sin su concurso y que "no tiene competencias para ser efectivo".

La consejera ve en el acto "una noticia magnífica para la sociedad vasca"

Lanbide nace con un presupuesto de 785,6 millones de euros para dar servicio a los demandantes de empleo y de ayudas sociales en un nuevo concepto de ventanilla única que va a simplificar y en teoría acelera no sólo la intermediación laboral, sino también la formación y la asistencia social. "La puesta en marcha del consejo de administración permite visualizar la transferencia de las políticas activas y es una magnífica noticia para la sociedad vasca y sobre todo para los demandantes de empleo", aseguró la consejera minutos antes de su constitución.

El consejo volverá a reunirse el jueves para empezar a sacar adelante nuevas medidas que seguirán la estela del anterior plan, que consiguió emplear a 5.700 personas, muchos de ellos receptores de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), con puestos de trabajo innovadores.

La portavoz parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, se sumó a las críticas vertidas por ELA y LAB y, en un comunicado, dudó de la "legitimidad" de la dirección de Lanbide. "El consejo de administración no cuenta con la mayoría sindical de Euskadi a la hora de diseñar tanto la orientación general del organismo, como la composición y funciones de sus órganos", cuestionó.

Pero esa no fue la única crítica y la parlamentaria de Aralar pidió a la consejera de Empleo que tenga en cuenta la proposición aprobada por la mayoría del Parlamento vasco, en la que se planteaba cambiar la naturaleza jurídica de Lanbide. De hecho, su creación como Ente Público de Derecho Privado sólo satisfacía a Zabaleta. Todos los demás partidos y sindicatos, incluidos UGT y CC OO, le presionaron para crearlo como un organismo autónomo. Una de las diferencias entre ambos es el control parlamentario de sus gastos. La mayoría nacionalista también se lo recordó ayer. "No aceptamos la naturaleza jurídica de Lanbide. Como dijimos en su momento, esta figura reduce la capacidad de control público y permite que la contratación de personal se haga de manera menos transparente", criticaron en una nota.

Falta de transparencia que, según entienden, va a tener especial relevancia cuando haya que subcontratar y adjudicar los diferentes programas de empleo y formación.