Granado: "Vamos a poner barata la mercancía de la contratación"
Trabajo no descarta compensar la rebaja de cuotas
La exención de cuotas que el Gobierno aprobó el viernes para los contratos a tiempo parcial tiene un objetivo: abaratar el coste de la mano de obra para estimular la creación de empleo. Así lo admitió ayer el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado: "En términos casi comerciales, vamos a ver si ponemos barata la mercancía de contratación de nuevos trabajadores". Posteriormente, el Ministerio de Trabajo espera que los nuevos empleados pasen "a ser cotizantes a la Seguridad Social".
El pasado viernes el Consejo de Ministros aprobó un plan de choque para estimular la contratación a tiempo parcial de jóvenes y parados de larga duración mayores de 45 años. El plan se basa, principalmente, en la exención total de cuotas sociales por un año para las empresas de menos de 250 trabajadores (el 75% para las compañías con más empleados) en las contrataciones a tiempo parcial que contraten durante 2011 por una jornada entre el 50% y el 75% de la jornada a tiempo completo. La medida estará vigente durante un año.
Para los despedidos antes de 2013, la legislación será la previa a la reforma
Unespa critica que la pensión futura no se calcule con toda la vida laboral
Este plan de choque supone, evidentemente, el abaratamiento de la contratación y Granado lo admitió con toda su crudeza en un acto sobre la reforma de las pensiones organizado ayer por la Asociación de Periodistas de Información Económica. Además, supone un cambio respecto de lo defendido hasta ahora desde el Ministerio de Trabajo, donde se rechazaba la rebaja de las cotizaciones a la Seguridad Social. No sería coherente con la defensa de una reforma del sistema de pensiones, argumentaban sus responsables.
Poner "barata la mercancía de contratación de nuevos trabajadores", supondrá que la Seguridad Social dejará de ingresar unos 235 millones de euros si se cumplen los objetivos marcados por Trabajo (la creación de 100.000 puestos de trabajo a tiempo parcial). No obstante, Granado afirmó que en su departamento no se descarta recibir una compensación por parte de los Servicios Públicos de Empleo, ya que con el estímulo a la contratación esperan ahorrar gasto en el pago de prestaciones y subsidios a parados.
Sobre la reforma de pensiones, Granado aclaró que para quienes sean despedidos antes de 2013 y estén en sus últimos años de la vida laboral la legislación vigente sobre jubilación anticipada será la vigente actualmente. Incluso será así para quienes pierdan su empleo más tarde de 2013 como consecuencia de un despido colectivo acordado y aprobado antes del 2 de febrero de este año, el día que se firmó el Acuerdo Social y Económico, que da pie a la reforma.
En el mismo acto, también participó la presidenta de la patronal de las compañías de seguros (Unespa), Pilar González de Frutos que criticó la reforma de pensiones por "insuficiente". Entre sus demandas, defendió que el periodo de cómputo para calcular la futura pensión abarque a toda la vida laboral.
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