Los jesuitas indemnizarán a 205 víctimas de abusos en Alemania

El rector del Colegio Canisius, Klaus Mertes, anunció ayer que se destinará un fondo de un millón de euros para indemnizar con 5.000 euros a cada una de las 205 víctimas de abusos en colegios pertenecientes a la orden de los jesuitas en Alemania. El Casinius fue la primera institución en sacar a la luz el año pasado las denuncias de abusos sexuales ocurridos entre los años sesenta y ochenta. Un millón de euros "es mucho dinero para nosotros", dijo Mertes, quien aprovechó para defender la necesidad de una nueva moral sexual para la Iglesia. La falta de debate acerca de la sexualidad es "muy peligrosa".

Alemania se vio sacudida el año pasado por una avalancha de información que desveló la ocultación sistemática de los abusadores por parte de la jerarquía eclesiástica. El escándalo se trasladó sucesivamente a instituciones laicas y adquirió tal magnitud que el Gobierno se vio obligado a convocar una conferencia para discutir sobre los abusos y cómo evitarlos en el futuro. En el marco de dicha conferencia, cuyos trabajos continúan estos meses, se deberían discutir también las indemnizaciones.

Según dio a conocer ayer la prensa alemana, se ha celebrado en el Ministerio de Familia una reunión con las víctimas y se ha acordado crear un grupo de trabajo que asesorará al Gobierno federal dentro de la conferencia; hasta ahora, las víctimas habían estado al margen de estas discusiones.

"Cantidad insuficiente"

"Esta cantidad de dinero es evidentemente insuficiente. En abril, con ocasión de la conferencia, queremos tomar posición", dijo Matthias Katsch, representante de la asociación Eckiger Tisch, que representa a las víctimas de abusos de jesuitas. Los afectados piden cifras mucho más altas, de alrededor de 80.000 euros.

A un año del inicio del escándalo de los abusos siguen surgiendo nuevos e inquietantes detalles. Dietrich Willer, uno de los fundadores del principal diario de la izquierda, Die Tageszeitung, ha sido acusado de abusos por varios ex alumnos de la escuela laica de la élite de Odenwald, cuando era profesor en esta institución. La noticia la publicó también por el mismo diario que ya hace algunos meses se había visto obligado a un examen de conciencia por haber dado espacio a pedófilos en las columnas de opinión en los sesenta y setenta: "Pedofilia, crimen sin víctimas, fue uno de los titulares más polémicos".