Recetas para salir de la crisis
Relevantes economistas esbozan las políticas más idóneas
Un relevante grupo de economistas de FEDEA, coordinados por Samuel Bentolila, Michele Boldrin, Javier Díaz-Giménez y Juan José Dolado, acaban de publicar un libro que analiza, de forma profunda y rigurosa, las políticas que podrían contribuir a que España superase una crisis económica que dura tres años.
Algunas conclusiones de este libro son:
Primero, no había ningún indicio de la existencia de brotes verdes cuando se hablaba insistentemente de ellos. Segundo, una causa principal de la actual recesión ha sido la creación y explosión de la burbuja inmobiliaria con el hundimiento del sector de la construcción residencial, siendo inexplicable no haber logrado un aterrizaje suave evitando así doce trimestres de crecimiento negativo.
LA CRISIS DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA. ANÁLISIS ECONÓMICO
DE LA GRAN RECESIÓN
Varios autores
Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA). Monografías 2010
Tercero, las cajas de ahorros, mayoritariamente controladas por políticos y grupos de interés locales, han desempeñado un papel protagonista en la formación de dicha burbuja al financiar demasiados proyectos inmobiliarios y aumentar sus oficinas por toda la geografía española mientras los bancos las reducían. Convendría privatizarlas como ya hizo Italia. Cuarto, la legislación concursal española adolece de graves defectos para facilitar que las empresas con problemas graves de solvencia puedan quebrar y ser sustituidas por otras más saneadas.
Quinto, las perturbaciones externas han tenido un papel mucho menor sobre la crisis que las internas. Sexto, los dos periodos de mayor crecimiento español están determinados por la interacción entre salarios reales y productividad y por el reducido nivel de capital humano. En 1986-1993, al existir un mercado laboral muy rígido, se crearon pocos empleos y los salarios reales absorbieron todas las ganancias de productividad. En 1995-2007, al estar el mercado de trabajo segmentado entre contratos temporales e indefinidos, se creó mucho empleo precario, de baja productividad y salarios bajos, destruido durante la recesión. Ahora, la productividad está creciendo y los salarios cediendo, lo que sugiere que para aumentar la productividad laboral y tener salarios razonables es necesario despedir masivamente hasta lograr una tasa de paro del 20%.
Séptimo, con una caída del PIB similar en Francia y España, el empleo en España se ha desplomado en comparación con Francia, demostrando que en España hay un claro incentivo para despedir al trabajador con contrato temporal sin hacer ningún esfuerzo por retenerlo o por elevar su productividad. Octavo, si los sindicatos controlaran el mercado laboral habría más productividad y poco empleo, pero con el sistema actual hay empleo precario, despidos masivos y baja productividad.
Noveno, los estímulos fiscales de 2008 y 2009 no han tenido efecto aparente alguno sobre el crecimiento. Si los modelos keynesianos hubiesen funcionado el crecimiento tendría que ser hoy mucho más elevado y no habría crisis fiscal, pero han fallado, como ocurrió en Japón tras su crisis inmobiliaria. También puede deberse al fuerte desplome de los ingresos fiscales, tan dependientes de la burbuja y de la recesión. Pero tampoco la subida del IVA parece haber reducido todavía el crecimiento, como predicen los modelos neoclásicos.
Este libro debe ser de lectura obligada para las autoridades económicas, los legisladores y todos los economistas que quieran conocer la visión de aquellos que más saben, que no siempre están de acuerdo y que creen que no existen soluciones fáciles y que toda política tiene un coste tal como reza su blog "nada es gratis". -
Guillermo de la Dehesa es presidente del Centre for Economic Policy Resarch, CEPR.
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