Apagar las risas

La Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA) ya se ha puesto en contacto con Ricky Gervais para decirle que el próximo año no cuentan con él para presentar la ceremonia de entrega de los Globos de Oro.

El cómico británico advirtió el pasado domingo antes de que empezara la gala de que, en cuanto se viera lo que había en el guión, todo el mundo sabría que sería su última vez. Pero no se lo ha tomado mal, y a los abundantes paparazis que lo andan acosando estos días les ha dicho que por qué daban por supuesto que a él le apetecería repetir. Si lo hizo dos veces, ¿para qué una tercera? "Va a ser una noche de juerga y mucho alcohol", comenzó diciendo Gervais, "lo que Charlie Sheen llama 'desayuno", añadió, refiriéndose a los recientes excesos del actor con unas actrices porno. Hizo bromas con The Tourist, para "desmentir el rumor" de que la película solo hubiera sido seleccionada para que acudieran a la gala Johnny Depp y Angelina Jolie, e hizo algún sarcasmo con la edad de Cher. Aludió a la película Philip Norris te quiero, donde "dos actores heteros fingen ser gais", pero solo para decir que hacen "justo lo contrario que algunos actores de la Cienciología" (Tom Cruise y John Travolta) y trató también del matrimonio de Hugh Hefner (el fundador de Playboy tiene 84 años) con una chica de 24.

Dijo que si Sexo en Nueva York 2 hubiera sido seleccionada, habría ganado el premio a los efectos especiales por "los retoques" y, en fin, ahí donde pudo ser sangrante, procuró serlo. Tocó, pues, algunas obsesiones de Hollywood y si dio nombres fueron de algunas estrellas que a estas alturas deberían estar curadas de espanto. Gervais se sirvió del humor para desnudar al rey: ni siempre es tan bueno como dicen, ni tampoco tan joven como quiere aparentar; tiene cierta querencia por los excesos e, incluso, podría ser que no termine de salir del armario. Y hubo risas.

Un cuarto de hora después, algunos de los citados se indignaron, y la HFPA se escandalizó entonces por los excesos de su presentador. ¿Se pasó de verdad Gervais? Habrá opiniones para todos los gustos, y eso es lo que antes que nadie deberían saber actores y periodistas. Y más que correr a apagar las risas, deberían defenderlas. Aunque duelan.