Tercera huelga general de ELA y LAB contra los socialistas en 20 meses

Los sindicatos nacionalistas ELA y LAB están convocando más huelgas generales tras el cambio de Gobierno que llevó a Ajuria Enea al lehendakari socialista, Patxi López, que los años inmediatamente posteriores a la muerte de Franco. De las quince huelgas generales convocadas por los sindicatos que operan en Euskadi desde 1979, cuatro lo han sido en los últimos 20 meses. Nunca antes se había producido una concentración semejante salvo de septiembre de 1979 a febrero de 1981 con otras cinco huelgas generales en 17 meses. Pero incluso entonces la mitad fueron promovidas también por UGT y CC OO, tras asesinatos de ETA y en protesta por la redacción del Estatuto de los Trabajadores, mientras que en estos últimos 20 meses, tres de las cuatro han sido registradas por la mayoría nacionalista contra medidas de los gobiernos autonómico y central que dirigen el PSE y el PSOE.

Los convocantes han rechazado una movilización junto a CC OO y UGT

La última fue ayer mismo, y se celebrará el próximo 27, en vísperas de que el Congreso de los Diputados debata sobre la reforma de las pensiones y la previsible subida progresiva de la edad de la jubilación hasta los 67 años. Es la última, de momento, de una tanda que comenzó el 21 de mayo de 2009, pocos días después del primer cambio de Gobierno, después de 30 años de gabinetes dirigidos por lehendakaris nacionalistas.

El dirigente de ELA Mikel Noval aseguró ayer, tras registrar la convocatoria de huelga en el Gobierno vasco, en Bilbao, que "los trabajadores vascos no aceptamos que haya que recortar las pensiones, ni vamos a aceptar que se retrase la edad de jubilación. Tampoco vamos a consentir que se adopte ninguna medida para modificar a la baja el cálculo de las pensiones".

ELA registró la huelga junto al resto de sindicatos que conforman la mayoría nacionalista, LAB, STEE-EILAS, EHNE e HIRU. Precisamente la representante de LAB, Beatriz Mantxueta, aseguró en la misma línea: "Los miembros de la mayoría sindical no vamos a asumir este nuevo ataque contra las pensiones, una reforma que va a dejar a miles de personas sin derecho a pensión".

Pese a la contundencia de sus argumentos, estos sindicatos han rechazado la posibilidad de celebrar una jornada de huelga unitaria junto a CC OO y UGT, pese a que estas fuerzas de ámbito nacional manejaban la fecha del 26 de enero como una alternativa con muchas posibilidades para protestar contra las reformas que debatirá el Parlamento español.

De hecho, el anuncio de la convocatoria de la última huelga general por parte de los ELA y LAB se hizo público el pasado 23 de diciembre en Pamplona. El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz fue el encargado de comunicarlo, apenas cinco días después de que los secretarios generales de CC OO y UGT, Unai Sordo y Dámaso, Casado, advirtieron de que si el Gobierno central mantenía el proyecto de elevar la edad de jubilación a los 67 años, en enero habría una nueva huelga general.

Si CC OO ya consideró hace unos días que la convocatoria de la mayoría sindical obedece exclusivamente a la "la obsesión de contraprogramar", ayer mismo les atribuyeron la responsabilidad de debilitar la respuesta sindical en Euskadi ante un problema de grandes dimensiones como la reforma de las pensiones. "Ya lo hicieron con la reforma laboral convocando una huelga general para el 29 de junio pasado, cuando podíamos haberla celebrado todos en septiembre", criticaron estas fuentes. UGT también cree que los nacionalistas están limitándose a crear una agenda propia, pero "a base de contraprogramar" movilizaciones para ganar protagonismo.