El fiscal baja a 25 años la pena de cárcel para el acusado de Amnesia

"Existen suficientes pruebas como para culpar a David Lozano de los cargos que se le acusan". Así de rotundo empezó el fiscal del juicio del crimen de la discoteca Amnesia la lectura de conclusiones. Poco antes había cambiado la petición de 48 años de cárcel por la de 25. Esta reducción se basa en que le imputa solo dos homicidios en grado de tentativa -frente a los tres que le atribuyó inicialmente- y reduce de tres a un año la condena por tenencia ilícita de armas. Mientras, la abogada del imputado, la ex fiscal María Dolores Márquez de Prado, mantuvo que su defendido no participó en los hechos que costaron la vida al portero de la discoteca Víctor Manuel P. P.

El fiscal basó parte de su intervención en las dos sentencias anteriores por el mismo caso en el que fueron condenados los otros detenidos por el crimen. Aseguró que semanas antes del crimen había habido enfrentamientos entre la banda de los iraníes y el grupo de Amnesia. "Los cinco concertaron y acordaron ir a la discoteca con la finalidad de dar muerte a Víctor Manuel", afirmó el fiscal en sus conclusiones.

La abogada pidió la puesta en libertad de David Lozano ya que, según su versión, solo un testigo vio al acusado en la reyerta que se produjo en la entrada de la discoteca. "Mi cliente se refugió entre los coches y no participó. El testigo que le incrimina solo tiene ánimo de venganza hacia David", afirmó la letrada, que empleó un tono muy solemne. A su lado estaba su marido, el ex juez Javier Gómez de Liaño, que no intervino en las conclusiones. "Espero que solo pongan en la balanza lo que aquí se ha oído", concluyó la abogada.

Lozano utilizó el derecho a la última palabra. Intervino menos de un minuto para pedir perdón por los problemas que ha ocasionado por estar seis años y medio huido de la justicia: "Quería presentarme ahora y por eso fue mi regreso. Al fiscal tengo que decirle que yo no estuve en ningún incidente anterior", concluyó. Instantes después, el juicio quedaba visto para sentencia.