Declara el ex jefe de Inmigración en Lugo por el 'caso Carioca'

El que fuera responsable en funciones del departamento de Inmigración del Ministerio de Trabajo en Lugo, Alberto Linares, declaró ayer como imputado por presuntos delitos contra la Administración pública ante la titular del Juzgado de Instrucción número 1 que investiga una trama de explotación sexual de mujeres en el marco de la denominada operación Carioca. El funcionario quedó en libertad sin medidas cautelares, en tanto que la instructora continuó, en otra larga jornada, tomando declaraciones a testigos del caso.

Antes de entrar en el juzgado, Linares señaló que los procedimientos derivados de su función se realizaron "con absoluto rigor y absolutamente de buena fe" y afirmó estar "absolutamente tranquilo". "Nosotros lo que hacíamos [en la oficina de Extranjería] era recibir los procedimientos y dictar resolución, que luego era ejecutada por las comisarías", explicó, en declaraciones recogidas por Europa Press.

Hace un año, este mismo funcionario tuvo que declarar en el Juzgado de Instrucción número 3 como imputado en un presunto caso de explotación de ciudadanos extranjeros. En este caso, las investigaciones judiciales, todavía no concluidas, tratan de esclarecer una presunta trama que se dedicaba a facilitar trabajo a inmigrantes que luego desarrollaban su actividad en condiciones infrahumanas.

La declaración del ahora director del área de Trabajo en la Subdelegación del Gobierno se produce tras haber pasado por el despacho de la juez el inspector jefe de Extranjería de la comisaría de Lugo, Evaristo Rodríguez -en libertad sin medidas cautelares-, y su número dos, Eduardo Castro, que sigue imputado por presuntos delitos de colaboración con la prostitución, omisión del deber de perseguir delitos, cohecho, prevaricación, tráfico de influencias y falsedad documental.