El último concierto

El último concierto. Será el próximo sábado 23 (a las 23.23 en El Sol, Jardines, 3). Así lo ha querido aquella rubia rockera y sexy que en 1980 cantaba "Yo tenía un novio que tocaba en un conjunto beat". Es el mejor momento para que María Teresa Campilongo Rubi, de 56 años (con una hija y un nieto), que vive a las afueras de Madrid, recuerde su historia como reina yeyé de la movida.

- Por Blondie y por la calle Casino. "Vine a Madrid desde Buenos Aires en 1976, con 22 años y una hija de cuatro. Al mismo tiempo aterrizaron otros músicos argentinos, como Moris, o Alejo Stivel y Ariel Rot, que luego formaron Tequila. Los primeros años los aproveché para terminar la carrera de Psicología. En 1980 empecé a ensayar en un local que estaba en la calle Casino, entre Lavapiés y la Ronda de Toledo. Era un garaje. Un día se presentó el periodista Rafael Abitbol, que tenía un programa en Onda 2. Le gustó mucho el grupo y como no teníamos nombre nos sugirió uno: 'Tú te podrías llamar Rubi, por el grupo Blondie, y la banda Los Casinos, ya que ensayáis en la calle Casino'. Nos pareció estupendo. Desde entonces fuimos Rubi y Los Casinos".

"No era una santa, pero en ese ambiente pasaba por un bicho raro"

"Toco para no olvidar que donde me siento bien es en un escenario"

- La primera en Rock-Ola. "Fui la primera cantante en español que actuó en Rock-Ola y la segunda en total después de los ingleses UK Subs. Era 1981. Me presenté en la sala pensando en que nadie me conocería. Solo esperaba unas 100 personas. Pero salí al escenario y había 1.000. No me lo creía. El público era alucinante, todos con cazadoras de cuero y empezaban a proliferar las crestas. Me quedé alucinada por las pintas de la gente, porque estaba acostumbrada a ver por la calle a la gente con el loden. Lo llamábamos 'el abrigo verde".

- Detenidos por llevar chupas de cuero. "Carlos Berlanga, Santiago Auserón y Paloma Chamorro

[presentadora del programa La edad de oro] me criticaban en plan de broma porque yo era demasiado rockera para su gusto pop. Es que me encantaban los Ramones. Un día íbamos todos (Berlanga, Chamorro, Fabio McNamara y yo) andando por los bajos de Princesa y la policía nos detuvo. ¿Por qué? Pues porque llevábamos cazadoras de cuero".

- "Yo tenía un novio que tocaba en un conjunto beat". "Cuando empecé a cantar 'Yo tenía un novio'... no tenía ni idea de los detalles de la historia. La letra era del dramaturgo Armando Fernández, y la música de mi ex marido, Joe Borsani. Y quedaba bien porque la cantaba una chica. Luego me di cuenta de que la letra era sobre un noviazgo homosexual entre dos chicos. Fue gracioso enterarse".

- En Arquitectura, ante 20.000 personas. "Aquel concierto de 1980 resultó grandioso. Fue en la Escuela de Arquitectura. Estábamos todos: Nacha Pop, Alaska con Ana Curra, Paraíso, nosotros... Dijeron que había 20.000 personas. Me acuerdo que mi hija, que era muy chiquita, iba detrás de Alaska y Ana Curra porque le encantaban sus pintas. Y ellas le regalaban carteritas y cositas muy pop".

- Se ligaba muchísimo. "Iba todos los días a Rock-Ola. Y cuando digo todos es literal. Siempre actuaba alguien interesante. Además, a los músicos nos invitaban a las copas. Se ligaba muchísimo allí. Y, sí, debía de haber mucha droga. Pero a mí no me gustaba. No voy a decir que era una santa, pero pasaba por ser un bicho raro en ese ambiente. Me diferenciaba que era la única madre, así que era la primera que me marchaba a casa para cuidar a mi hija. No sé, igual es porque fui a un colegio de monjas y era algo conservadora en cuanto a costumbres".

- Descreída de la industria musical. "En los años noventa me harté. Estaba descreída de los mánagers, de las compañías de discos... Todos te intentaban engañar. Así que me fui alejando. Pero seguí tocando, quizá incluso más que en los años ochenta. Actuaba, de miércoles a sábado, en sitios pequeños, como Café La Palma, Honky Tonk, pubs chiquitos de Quintana, Ventas... A veces lo hacía como Rubi y Los Casinos y otras como Hot Dogs, donde hacíamos clásicos de rhythm and blues".

- Mi último concierto. "Los últimos años he estado actuando esporádicamente, por gusto. He vivido de la psicología. El concierto del próximo sábado será el último. Toco para no olvidar que como me siento bien es sobre un escenario, pero creo que debo dejarlo porque la edad pasa factura. Como el 23 es mi último concierto, quiero que me vea mi nieto, Nicolás, que tiene ocho años. Intentaré que le dejen pasar... y que sea lo que Dios quiera".