Jiménez se autoproclama la candidata del cambio para "ganar en Madrid"

La candidata Trinidad Jiménez subió ayer a un escenario lleno de mujeres. Más de 60 simpatizantes femeninas estaban tras ella en el teatro La Jaramilla de Coslada. Otra mujer, la ex ministra Cristina Narbona, le acompañó en el mitin. Pero fueron varios hombres -los alcaldes de los principales feudos socialistas madrileños, como Getafe o Coslada- los que hicieron una demostración de fuerza y un ataque al otro candidato, Tomás Gómez. Jiménez se autoproclamó la candidata del cambio para "ganar en Madrid" y repitió varias veces el que suena ya como otro eslogan de campaña: "Si podemos gobernar, no tenemos derecho a perder".

"Tenemos que sacudirnos la resignación de que aquí, en Madrid, es muy difícil ganar", recalcó Jiménez en su primer acto público tras la proclamación oficial de candidatos. Fue en el teatro La Jaramilla ante medio millar de militantes que la interrumpieron al grito de "presidenta" y coreando "nosotros somos las bases". La candidata y ministra de Sanidad arremetió de nuevo contra las políticas sociales del Gobierno de Esperanza Aguirre. Y esta vez aludió a ejemplos concretos: "Quiero decirle a la gente que no tiene que esperar dos años para recibir la ayuda a la dependencia, que la van a tener en seis meses. Quiero ser presidenta para que cuando un paciente y vecino de Coslada llegue al hospital privado que ha abierto Aguirre no lo tengan que derivar al Gregorio Marañón porque aquí no hay medios para atenderlo".

"Lo mismo que está haciendo Zapatero lo podemos hacer nosotros en Madrid"

La candidata considera que la celebración de primarias servirá "para poder recuperar la confianza de los madrileños". Y prometió emular al presidente Zapatero si vence en octubre y gana después en mayo a Esperanza Aguirre: "Lo mismo que está haciendo Rodríguez Zapatero lo podemos hacer nosotros en Madrid".

La ex ministra Cristina Narbona -que presidió la gestora que pilotó el partido entre la dimisión de Rafael Simancas y el nombramiento de Tomás Gómez- aseguró que "Madrid se merece un Gobierno regional que piense en los ciudadanos y devuelva la transparencia, la honestidad y la ética a las estructuras del Gobierno regional". Narbona, histórica del PSM, se volcó ayer con la candidata. "La mejor opción que tenemos es Trini", dijo.

Los alcaldes de Getafe y Fuenlabrada, Pedro Castro y Manuel Robles, respectivamente, fueron los más duros con Gómez. Le dijeron que dar un paso atrás no equivale "a ser sumiso" y le pidieron que se desmarque públicamente de las críticas que socialistas veteranos, como Joaquín Leguina, han lanzado contra el presidente Zapatero.