La Comunidad promete ahora pactar la imagen de Metro

"Aumentamos el logotipo de la Comunidad porque estéticamente nos parece mejor y tenemos derecho a hacerlo". El consejero de Transportes e Infraestructuras, José Ignacio Echeverría, respondió ayer así a la queja del Ayuntamiento por la imagen de los nuevos vagones de Metro en los que la bandera de la Comunidad ha adquirido más protagonismo que el logotipo de la compañía. Echeverría tilda el asunto de "chorrada" pero, al mismo tiempo, promete alcanzar un consenso con el Consistorio, sin aclarar si se retirarán o no las banderas antes de que los primeros trenes empiecen a circular en las próximas semanas por la línea 6.

El edil de Hacienda y presidente de Metro, Juan Bravo, amenazó el jueves en la última reunión del Consejo de Administración de Metro con no pagar la aportación municipal de los trenes -casi 500 millones en 17 años, la mitad del coste total- si no se retiran las insignias de las siete estrellas que decoran con profusión -unas 20 por tren- los nuevos coches a menos de ocho meses de las próximas elecciones regionales y locales.

Echeverría basa "el derecho" de la Comunidad a poner más banderas a la cantidad con la que cada Administración subvenciona la red de Metro. "Nuestra aportación al Consorcio Regional de Transportes equivale al 81% frente al 18% del Ayuntamiento", según el consejero. Pero la queja de Bravo no hacía referencia al montante global, sino a la cantidad que pagan por los trenes. Los que circulan dentro de la ciudad (corona A) se abonan a medias.

"La petición del presidente es que no haya ninguna bandera, yo le diría entonces de broma que en los autobuses de la EMT [Empresa Municipal de Transportes] hay que quitar el logotipo del Ayuntamiento", añadió el consejero de Transportes.

Bravo, que declinó hacer declaraciones, había solicitado en varias ocasiones a la Consejería de Transportes la retirada de las banderas antes de plantear su queja en el Consejo, tal como admitió ayer Echeverría, que le quitó hierro a la amenaza. "No creo que el Ayuntamiento deje de hacer su aportación, que es su obligación y puede poner el sistema en peligro", minimizó el consejero.

Echeverría respondió también a la segunda queja que el edil de Hacienda llevó al Consejo. Juan Bravo aseguró que se había enterado por la prensa de la demanda que prepara la empresa pública contra los sindicatos por la huelga que organizaron el pasado julio y planteó revisar las competencias en una nueva reunión para que este tipo de decisiones se tomen de ahora en adelante en el seno del Consejo.

"Si [Bravo] no se enteró fue o porque no quiso o no sé, el presidente de Metro tiene todo el poder y la responsabilidad de pedir información de lo que se está haciendo", según Echeverría, que prosigue: "Si se ha enterado por la prensa a lo mejor estaba muy ocupado o no tenía interés de que en el Metro le informaran, yo llamo por propia iniciativa".

"Metro tiene que regularse por sus propias normas no puede ser un ring para pelearse entre Administraciones", opina el consejero sobre la petición de que la demanda se discuta en el Consejo.

Por su parte, el consejero de Presidencia, Francisco Granados, sí admitió ayer que la preparación de la demanda por la huelga debía "sin duda" haberse consultado con el presidente de Metro, como miembro de los órganos de dirección de la empresa. Y que si no se había hecho ya se estaría hablando con él. Fuentes municipales aseguran que nadie llamó a Bravo antes de tomar la decisión ni lo ha hecho después de su queja.