Hereu atribuye a "gente ociosa" el debate sobre su futuro como candidato

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, dio ayer un paso más en su propia defensa como candidato socialista en las próximas elecciones municipales. Hastiado -no lo puede disimular- del inicio del curso político, que le ha puesto en la picota, Hereu achacó el debate sobre su futuro como candidato a "gentes ociosas que ensucian" su "proyecto". No fue más allá. El debate sobre quién será el candidato por Barcelona ha sido suscitado, entre otros, por algunos miembros de la cúpula de su propio partido. Son los que consideran que el proyecto que personifica el alcalde está finiquitado -basándose en la caída en picado del PSC en la ciudad en el último año del mandato- y barajan nombres de pesos pesados -como el consejero de Economía, Antoni Castells, y la de Justicia, Montserrat Tura, y también el ex consejero y ex concejal de Cultura Ferran Mascarell- para encabezar la candidatura de las municipales, sin descartar personas del propio equipo del alcalde. "Esa decisión, si se toma, no se hará hasta después de las autonómicas", insistía un miembro de la federación poco antes de que Hereu presentara su informe político en la sede del PSC.

En primera fila, Miquel Iceta, viceprimer secretario del PSC, y el histórico secretario de la federación Joan Ferran. Ellos y todos los militantes socialistas saludaron la entrada del alcalde con una larga y cálida ovación para reconfortar y apoyar a Hereu, que ha encarado la recta final del mandato con una tormenta política. Con más distancia, de pie al fondo de la sala, observaba el secretario de organización del PSC, José Zaragoza.Hereu suele rehuir entrar en polémicas políticas. Ayer, sin embargo, lo hizo dos veces. Una, de menor intensidad, al reunir por la mañana al completo al equipo de gobierno para pedirles que no hagan caso del ruido político y que trabajen con ganas. "La consigna es que hay que acabar los proyectos en lo que resta del mandato y estar atentos a los ciudadanos", comentaba un edil después de la reunión, con la que se pretendía lanzar el mensaje de unidad entre los ediles socialistas y sus socios de ICV, con Imma Mayol y Ricard Gomà en primera fila.

Hereu fue más candidato y menos alcalde en el informe ante la federación socialista de Barcelona, y se defendió con más energía de los que le cuestionan. "Hasta ahora, unos pocos han hablado mucho. Ahora lo haré yo", remachó. El alcalde argumentó que en los tres primeros años del mandato se ha dedicado más a la ciudad, "pero ahora, en los próximos meses, hablaré más, para explicar qué hemos hecho", dijo.

Dejó claro que plantará cara para ser el candidato de Barcelona. Sin embargo, la posibilidad de medir sus fuerzas con un rival de su propio partido en un proceso de primarias no la acaba de asumir: "es algo que no depende de mí, sino del partido", contestó al ser preguntado tras la reunión con los concejales. Un duelo entre socialistas que, aunque se admite, cuesta de vislumbrar. Por lo menos así lo expresaba ayer un destacado miembro del PSC: "Es mejor otro tipo de soluciones".

En su informe, Hereu defendió el trabajo realizado por su gobierno y, en un tono triunfalista, dijo ante los militantes que Barcelona ha invertido más en tres años bajo su mandato que cualquier "ciudad de España y hasta de Europa".

Apenas hizo autocrítica. No mencionó las sucesivas crisis que ha atravesado su gobierno ni la falta de entendimiento con sus socios de ICV. Solo admitió algún error, como el de la consulta de la Diagonal. De los Juegos de Invierno de 2022, ni palabra.

El alcalde destacó que el "salto hacia delante" de la ciudad solo ha sido posible con otro Gobierno socialista en la Generalitat: "Necesitamos seguir con Gobiernos progresistas". De paso, dejó claro su compromiso con el presidente de la Generalitat, José Montilla, en las elecciones autonómicas. Hereu concluyó su informe ante los militantes pidiendo permiso: "Si me dais permiso, el candidato a las elecciones seré yo".

Lejos de micros y cámaras, en la reunión de la federación de Barcelona, donde se discutía su aportación a las listas autonómicas, se produjeron 12 intervenciones. La mayoría fueron de apoyo al alcalde y de reproche a quienes intentan postularse a través de los periódicos. "Si alguien quiere hacerlo, que se presente a las primarias", dijo una fuente del partido.

Fue inevitable que la atención se centrara también en Assumpta Escarp y Jordi Williams Carnes, los dos tenientes de alcalde cuyos nombres han aparecido en alguna quiniela del partido como hipotéticos relevos de Hereu.

Durante la reunión, Escarp se expresó con contundencia y afirmó: "El alcalde y presidente de la federación de Barcelona sabe que yo nunca me he postulado para ser alcaldesa". Carnes no fue tan meridiano. Se esperaba que hiciera una intervención del calado de la de Escarp y se limitó a subrayar que Barcelona necesita un liderazgo fuerte.