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La asociación planea fletar una 'flotilla de la libertad' hacia la ex colonia

Los 14 activistas canarios detenidos en El Aaiún el pasado sábado presentarán varias denuncias contra la policía marroquí por tortura, agresiones verbales y detención ilegal, según afirmaron a su llegada a Tenerife. El grupo de españoles aseguró haber vivido una odisea desde que a las cinco de la mañana fueran trasladados desde la comisaría central de El Aaiún hasta la Casa de América y de allí a un barco para volver a Canarias. Su organización, SaharAcciones, planea ahora el envio de una flotilla de la libertad de tres barcos a la ex colonia española ocupada por Marruecos.

Los activistas llegaron a Las Palmas a las ocho y media de ayer y, posteriormente, tomaron un avión a Tenerife. En el aeropuerto, alrededor de 200 personas, entre familiares y simpatizantes del Frente Polisario, esperaban a sus compañeros con pancartas con lemas como Sahara libre y No a la represión de Marruecos.

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Uno de los momentos más emotivos se vivió cuando la activista Carmen Roger, con sus ojos aún amoratados, se fundió en un abrazo con su hijo Izem de 22 años. "Las familias que estábamos en Canarias lo hemos pasado muy mal porque en ningún momento, nadie se puso en contacto con nosotros para informarnos y es muy duro encender la tele y ver a tu madre con la cara hinchada por los golpes en la CNN", dijo Roger.

Incomunicados

Otra de las detenidas, Esperanza Jorge, recordó cómo la policía marroquí cargó de forma brutal. "Fue todo muy rápido. La policía ya sabía que íbamos a protestar. A las 18.30 ya nos estaban esperando. Cuando llegamos a la calle Samara [el lugar de la manifestación] nos pusimos las camisetas con el lema Sahara libre y una bandera saharaui confeccionada con pañuelos", relató Jorge.

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"En minutos nos disolvieron de manera brutal, nos quitaron la pancarta, nos escupieron, patearon y nos tiraron al suelo", prosiguió. "Cuando nos detuvieron nos retiraron los teléfonos y los móviles y no nos dejaron llamar a la embajada. Estuvimos horas incomunicados". Para Anselmo Fariña, el portavoz de los activistas durante la detención, la actitud de Exteriores durante la crisis "ha dejado mucho que desear". El portavoz aseguró que se sintieron "completamente abandonados".

En Tenerife, los activistas fueron trasladados al Hospital Universitario de Canarias para un reconocimiento completo y obtener un parte de lesiones que se presentará con la denuncia contra el Gobierno de Rabat.

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