A la caza del militante

"Hay un 60% de afiliados al Partido Socialista de Madrid (PSM) que no se acercan a las agrupaciones. No participan en la vida orgánica del partido", asegura un destacado dirigente socialista. "Pero votan. La batalla de las primarias las ganará quien consiga movilizarlos", reflexiona este político que conoce profundamente los entresijos del convulso Partido Socialista de Madrid (PSM).

Las primarias entre los socialistas madrileños están agitando un partido cuya militancia estaba adormecida por las luchas fratricidas y los fracasos electorales de los últimos años. Media docena de cargos socialistas que en algún momento han tenido mucha responsabilidad en el partido sostienen la afirmación: las primarias las ganará quien movilice a la militancia dormida.

"El perfil del militante es similar al de la población", señala un dirigente

"Trini solo puede mejorar y Tomás perderá apoyos", dicen en la ejecutiva

El pasado jueves, la dirección federal del partido trasladó el censo oficial de afiliados al Partido Socialista de Madrid. El resultado es que hay 17.843 personas que están al corriente con las cuotas y podrán votar en las primarias que enfrentarán a Tomás Gómez, secretario general del PSM, y Trinidad Jiménez, ministra de Sanidad, por conseguir la candidatura para la presidencia de la Comunidad de Madrid.

Hace tres años, los que tenían derecho a voto eran unos 2.000 afilados más. "Aparte de las bajas por defunción, tenemos un partido con gente mayor, se han dado de baja por falta de ilusión, escasa participación interna en las agrupaciones y escaso éxito del plan de afiliación", cuenta un diputado regional crítico con el actual secretario general. A estas causas hay que añadir la suspensión de la agrupación socialista de Móstoles, con más de 700 afiliados.

El censo ya está en manos de la dirección del PSM, que lo cederá al equipo de Jiménez en cuanto comience oficialmente la campaña para las primarias. "Un millar de esos militantes son cargos públicos u orgánicos. Votarán en función de sus intereses profesionales. Según los cargos que les ofrezcan o las presiones que reciban", explica un diputado socialista. Se refiere a diputados, parlamentarios regionales, alcaldes, concejales, vocales vecinos, altos funcionarios y otros cargos dentro del partido.

Los equipos de ambos contendientes diseñan sus estrategias para convencer a la militancia pasiva. La plataforma de apoyo a Jiménez prepara actos públicos en los que intervendrán personalidades del mundo de la cultura, el espectáculo, las ciencias y la educación. Por su parte, Gómez sigue trabajando con los secretarios generales locales. Ambos políticos están confiados en la victoria. Preparan la recogida de avales (necesitan al menos un 15% de firmas). El próximo día 22 de septiembre tendrán que entregarlos. Será un termómetro perfecto para ver cómo está el reparto de fuerzas. Por eso, Gómez y Jiménez se han lanzado a una frenética carrera para recabar apoyos. Y ese maratón pasa, de momento, por las fiestas patronales de los pueblos de la región. Allí, frente a los militantes y simpatizantes, se colocan delantales para preparar paellas, acuden a los toros o se ponen a tirar unas cañas. Lo que sea para convencer a los indecisos.Los equipos de los aspirantes coinciden en señalar que la participación en las elecciones primarias será alta. "Todo el que está en el censo es que está al corriente de los pagos y se supone que se implicará. La participación puede ser del 80%", cuenta un miembro de la ejecutiva del PSM. "La gente se acercará a las agrupaciones para ver qué tienen que decir los aspirantes. Escucharán y tomarán nota y decidirán de forma individual. El aparato del partido no controlará el voto tanto como otras veces", precisa un diputado regional próximo a Jiménez.

Antes de convencerlos tienen que saber quiénes son los militantes socialistas en Madrid. "El perfil del militante socialista es muy similar al de la población. No somos algo aparte. Es muy parecido al perfil sociológico de las propias agrupaciones", explica un dirigente que tuvo responsabilidad en la organización. "Por eso", cuenta otro político próximo a Gómez, "en la zona, norte y oeste predominan altos funcionarios de la Administración del Estado, abogados y profesionales liberales. Estos suelen tener titulación académica. En el sur, debido al tejido industrial de la zona, hay más trabajadores, normalmente están vinculados al sindicato (UGT)". Y prosigue: "En la ciudad de Madrid pasa lo mismo. En los distritos del norte y en los del sur".

Por eso, los actos públicos de Gómez y Jiménez se diseñarán en función del lugar al que acudan. La carrera de ambos aspirantes es febril. Esta semana, Gómez ha visitado, con el autobús del partido, varios distritos de Madrid (Fuencarral, Chamberí y Latina). También ha recorrido Fuenlabrada, San Sebastián de los Reyes, Alcalá de Henares y Colmenar Viejo. La ministra también ha seguido una agenda apretada que la ha llevado a Collado Mediano, Getafe, Valdeolmos-Alalpardo, Hoyo de Manzanares, San Sebastián de los Reyes, Moralzarzal y hoy estará en Alcalá de Henares.

A pesar de que ya se han producido escaramuzas entre los entornos de ambos rivales, casi todos piensan que "todavía no ha habido juego sucio". "Lo que ha ocurrido no es grave", insisten. Pero creen que lo habrá.

Las redes sociales bullen en favor de uno u otro. Comienzan a aparecer videomontajes contra Gómez recordando su debilidad en todas las encuestas desde que es secretario general o foros beligerantes con Jiménez. Los seguidores de ambos aspirantes se envían mensajes telefónicos cruzados. Entre ellos, arrecian las protestas de los seguidores de Jiménez porque consideran que el equipo de Gómez utilizó el censo para enviar SMS a los militantes para que apoyaran a Gómez en un programa de televisión. Los simpatizantes de Gómez critican a su vez el apoyo de la dirección federal a Jiménez.

Mientras recorren la región, los aspirantes también trabajan para lograr otras adhesiones. Así, Jiménez ha recibido está semana el apoyo del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; la ex ministra de Medio Ambiente Cristina Narbona, Jaime Lissavetzky y los alcaldes de Getafe, Leganés, Collado y Fuenlabrada.

Gómez cuenta con el respaldo de 109 secretarios generales locales. También ha recibido el aval de José Andrés Torres Mora, asesor personal del presidente Zapatero; o de los veteranos dirigentes Joaquín Leguina, Juan Barranco y José Acosta, que manejan el partido desde hace lustros.

Las fuerzas están repartidas y, aunque Gómez comenzó con ventaja, el equipo de Jiménez poco a poco va sumando avales. "El escenario está claro. Gómez comenzó con un apoyo abrumador. Trini solo puede mejorar y Tomás irá perdiendo apoyos", señala un destacado miembro de la ejecutiva regional. En lo que todos están de acuerdo es en que la batalla será dura. Y llegarán ajustados al final.