Francia, entre el humor y el malhumor
Dirigir a Francia, adversario hoy de España, es como tratar de dominar un vagón en plena montaña rusa. Vincent Collet, su técnico, expone su experiencia. ¿Cómo se explican sus cinco derrotas en los siete partidos de preparación? "Estamos obligados a jugar al ciento por ciento cada vez para entrever la victoria. Cuando olvidamos nuestros fundamentos defensivos, sufrimos y nos convertimos en desmenuzables. Debemos evitar estos saltos de humor. Dispongo de un equipo joven e inexperto. Es su defecto", explica.
El defecto francés ya traicionó a De Colo, base del Valencia y ahora uno de los pilares de su selección, cuando rompió un código no escrito -no hacer a sabiendas todo lo posible por ganar- y encestó una canasta en el último instante ante Grecia en el Europeo de 2009. Aquel intrascendente triunfo condenó a Francia a verse las caras con España en los octavos. Resultado: un nuevo fiasco, 56-86, de un cuadro que suele comparecer con mucho bombo en los campeonatos y abandonarlos de mala manera.
Pero España es uno de los equipos que sabe cómo se las gasta Francia en un buen día. En el Europeo de 2005 los franceses ganaron su única medalla en los nueve últimos años vapuleando, 68-98, a los españoles, sin Pau Gasol y dirigidos por Mario Pesquera. Sergio Scariolo los tiene en alta consideración: "Junto a Estados Unidos, es el equipo más atlético. Cuenta con jugadores con una carrera sólida en la NBA y con Traoré, uno de los pocos cincos puros en Europa. Es temible y hay que estar atentos para jugar con toda la energía que se requiere ante un adversario así".
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