Imágenes como gritos

Contra los disparos de las balas, ruido de obturadores, y contra el silencio de la muerte y la resignación, fotos como gritos, cargadas de mensajes que suenan alto y claro. La veintena de instantáneas de Emilio Morenatti (Zaragoza, 1969) que, hasta fin de este mes, salen al encuentro de los transeúntes en la calle Alcalde Rey Daviña de Vilagarcía, tienen el poder de contar una historia ocurrida a muchos miles de kilómetros, el éxodo de refugiados en Pakistán, ocurrido entre 2008 y 2009, a causa de los combates entre el ejército y las milicias talibanes. Su exposición Refuxiados forma parte de la programación del Festival de Fotografía Proxecta 2010 que celebra su tercera edición en la ciudad arousana bajo la dirección de los también fotógrafos Miguel Riopa y José Luis Oubiña.

En un país que vuelve a colarse en los informativos por culpa de otra tragedia, las inundaciones, durante dos años vivió y trabajó como director de la sección de fotografía de Associated Press en Pakistán este reportero, criado en Jerez de la Frontera, que ahora tiene que conformarse con observar los acontecimientos desde el sofá y con escuchar lo que le cuenta su mujer, Marta Ramoneda, fotógrafa freelance, quien acaba de partir para cubrir esta nueva catástrofe humana. Hace un año que perdió un pie en el atentando contra el convoy militar estadounidense con el que viajaba por Kandahar (Afganistán). Es otra experiencia negativa que se suma a su secuestro de un día en Gaza, en 2006.

"Me gustaría que esto no hiciese cambiar nada, pero aún es pronto para decirlo. Yo era una persona muy activa y ahora lo soy menos porque tengo que adaptarme a una pierna que no tengo y a una prótesis que no tenía", explica Morenatti, quien despoja su trabajo de cualquier sombra de heroicidad.

"Mi empresa nos facilita buenos medios y apoyos locales que nos permiten sobrevivir de una manera que no sé si podría tener por mi cuenta. Soy un privilegiado por ser consciente de la suerte que tenemos en Occidente y por poder transmitir el sufrimiento de otros; si el mensaje llega claro, es que el trabajo no está del todo mal hecho. Por eso es muy halagador que estas fotografías se exhiban en Vilagarcía, eso quiere decir que se les ha extendido la vida más allá de los periódicos del día", cuenta con humildad quien ha recibido premios como el de la Asociación Nacional de Fotógrafos de Prensa de Estados Unidos en 2010, FotoPress 2009 y una mención de honor en los World Press Photo 2007.

Aún convaleciente, Morenatti no ha parado de trabajar en todo este tiempo y dice con orgullo que sigue perteneciendo "a un grupo de fotógrafos preparados para saltar a cualquier parte del mundo donde ocurra algo". Este verano ha estado en Sudáfrica, retratando otras realidades relacionadas con el Mundial de fútbol, pero desde otro punto de vista: el de quienes se quedaron fuera de los partidos, los que no tenían entrada.

Esta tarde (17.30 horas) contará su experiencia profesional y vital ante quienes acudan al Auditorio Municipal de Vilagarcía para asistir a una charla que forma parte de las actividades del festival, evento que además programa para esta noche una sesión de proyecciones fotográficas nocturnas al aire libre (22.30 horas, calle Romero Ortiz) con obras del jerezano y de los otros once profesionales invitados al certamen, entre los que se encuentran el iraní Reza Deghati, de National Geographic, las instantáneas sobre la construcción naval del vigués Chou Pesqueira, los trabajos sobre moda de Manuel Outumuro y la fotografía conceptual de José María Díaz-Maroto.