Fiscalía detecta en 18 meses 65 falsos menores protegidos
Eran extranjeros y ocupaban unas plazas irregularmente
Entre junio de 2008 y diciembre de 2009 "se ha podido acreditar a través de las pruebas médicas (ortopantomografía y radiografía de clavícula) la mayoría de edad de 65 supuestos menores que ocupaban plaza en el centro de recepción Ambrosio Huici". Así lo recoge la memoria de la sección de menores de la Fiscalía de Valencia. Es decir, durante ese tiempo, 65 personas de origen subsahariano permanecieron en el centro de recepción amparadas en la protectora legislación para menores inmigrantes indocumentados cuando eran mayores de edad. En la memoria de 2007, tras una inspección realizada por la propia fiscalía, se recogió la saturación de dicho centro y la imposibilidad de atender en condiciones a los que necesitaban ingresar. Ahora, dice la última memoria presentada, el centro se encuentra mínimamente ocupado: entre 20 y 30 plazas de un total de 80.
Un equipo multidisciplinar se encarga de aclarar los casos
El centro de reclusión, lleno en 2007, está ahora medio vacío
La policía nacional, el hospital General y la clínica forense, junto con la fiscalía, han formado un equipo multidisciplinar empeñado en desenmascarar la ilegalidad, en cuanto en la edad, en los menores extranjeros indocumentados, sobre todo de origen subsahariano. Los informes realizados han sido "detallados y contundentes", recoge la memoria. Y permiten, además, establecer unas pautas comunes: los pasaportes que aportan no presentan, a priori, ningún signo de falsedad; antes de ingresar en el centro, y ante la duda, declaran ante un representante consular o diplomático, que no puede despejar las posibles incógnitas; ingresan en el centro después de que se les haya realizado la prueba ósea, que no es suficiente; normalmente usan o tienen una identidad distinta de la que figura en el pasaporte donde dice que es menor; en algunos casos también les consta una detención por infracción contra la ley de Extranjería, que solo se puede aplicar a mayores de edad; a veces entregan pasaportes que no están firmados; o pasaportes que no tienen el visado obligatorio; o pasaportes con fechas en las que está probado que el supuesto menor ya estaba en España. La fiscalía ha podido despejar la verdadera identidad de 65 falsos menores porque hace tres años puso en marcha un protocolo, costoso, que siguen las fuerzas y cuerpos.
Por otra parte, la memoria de la Fiscalía de Menores de 2009, además, hace una petición expresa de la extensión de la videoconferencia como una herramienta que facilite el trabajo de forma sustancial y garantista. Considera que es oportuna su utilización en la realización de ruedas de reconocimiento (para lo que hace falta, claro está, que tengan terminales los centros de reforma y de protección). Entiende que también es conveniente para la realización de exploraciones a los menores y declaraciones de testigos (lo que obligaría a la colocación de terminales en los partidos judiciales y destacamentos de fiscalías distantes de la capital).
Advierte también de la conveniencia de esta tecnología en las dos salas interconectadas en la sección de menores "a fin de llevar a cabo las exploraciones de menores con mayores garantías en cuanto a la intimidad de menores en caso de agresiones sexuales y de otros delitos de gravedad". La fiscalía reclama además la conexión del sistema de videoconferencia entre las tres secciones de menores de las fiscalías provinciales entre sí y con la Fiscalía Superior, "por estimar que el funcionamiento de la Fiscalía Superior pondrá en marcha programas conjuntos", dado que está previsto un fiscal de menores en esa cúpula del ministerio público en el ámbito autonómico. Es una de las reclamaciones de mayores y mejores dotaciones técnicas y humanas para hacer frente a las necesidades del servicio.
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