Las nuevas rutas de Xoel López
El músico coruñés enterró a Deluxe para peregrinar sin ataduras por otros estilos
En su etapa universitaria en Santiago, Xoel López (A Coruña, 1977) veía pasar peregrinos mientras rasgaba las cuerdas de su guitarra bajo el arco del Pazo de Xelmírez, y recuerda cuando el futbolista del Depor Fran le dio 500 pesetas en ayuda a su musica callejera. Años después, aquel estudiante de Magisterio que nunca llegó a maestro ejercería de guía experto por el Camino de Santiago en una serie documental de National Geographic.
El músico anónimo se había convertido en Deluxe, una estrella en lo más alto del firmamento pop español. Pero como al más anónimo de los mochileros, la ruta xacobea le cambió. Deluxe se reencontró con Xoel López: "Aprendí que el Camino es una excusa para hacer un viaje interior, y que ese recorrido de cada uno puede empezarse en cualquier parte". Él ha elegido América como punto de partida de su nueva peregrinación personal y musical, en la que ha experimentado con ritmos y amigos del otro lado del Atlántico. En octubre, Xoel López y su Caravana Americana ganarán su propio jubileo con conciertos en Vigo, Bilbao y Madrid.
Trabajó en un documental de la ruta xacobea para National Geographic
Ha elegido América para comenzar una nueva aventura personal y musical
A su regreso, en octubre, ofrecerá tres conciertos en España
Voló desde Madrid sólo para comer un plato de lamprea en las Rías Baixas
En la primavera del 2008, mes y medio de rodaje de documental en ruta de Ámsterdam a Santiago por el Camino Francés fue el paréntesis que Xoel López necesitó para reflexionar sobre su vida y obra. "Conocí a muchos peregrinos que andaban solos para descubrirse a sí mismos, otros que habían tenido algún problema y buscaban ayuda, o los que simplemente querían pasarlo bien con la experiencia", explica. Todos ellos habían hecho un alto en su existencia y se habían concedido unos cuantos compases de espera. En ese momento, en el pentagrama del músico gallego no había espacio ni para un silencio de semifusa.
A los 17 años grabó por primera vez con The Covers y, un año después, se embarcó con Elephant Band, hasta que abandonó la formación para emprender carrera en solitario como Deluxe. Tras dos discos en inglés Not What You Had Thought (2001) e If Things Were To Go Wrong (2003), se aleja de las influencias britpop por un estilo más personal y en castellano. En 2005, su álbum Los jóvenes mueren antes de tiempo fue elegido por la revista Rolling Stone como el mejor álbum español del año. Sus dos últimos trabajos, Fin de un viaje infinito y Reconstrucción, también fueron los mejores discos del año para la revista Efe Eme en 2007 y 2008. Al tiempo, nunca dejó de experimentar con aires más folk en el dúo Lovely Luna, con Félix Arias.
El chico que no llegó a profesor de infantil porque le faltaba paciencia para tratar con los niños acabó por perderla también con la industria musical. Tras una etapa en la que se veía obligado a sacar un álbum por año, se negó a seguir por el camino del éxito al uso, el que lleva a hacer canciones en función de las ventas, el que evoluciona hacia conciertos cada vez más multitudinarios en escenarios cada vez más deslumbrantes. No tuvo que cambiar por demanda de un público más que satisfecho con lo que hacía. Empezó de cero en lo mejor de su trayectoria para responder ante sí mismo.
Se fue a América para probar nuevas experiencias, para conocer otros países, e inevitablemente acabó sumergiéndose en nuevos ritmos y texturas. Sin un programa formal, lleva un tiempo dando conciertos con músicos locales desde San Francisco a Buenos Aires, pasando por Nueva York, Santo Domingo, Bogotá, Caracas o Santiago de Chile.
Cuando está en la capital argentina, donde tiene domicilio más o menos fijo, confiesa que a veces echa de menos A Coruña y Galicia, "que no Madrid, a pesar de haber vivido allí más de una década". De hecho, cuenta que, en una ocasión, cuando vivía en la capital de España, en un acto de morriña gastronómica tuvo que coger un avión para venir a comer lamprea a las Rías Baixas.
Xoel reconoce que el dorado porteño de los emigrantes gallegos no es tierra prometida para artistas: "En Buenos Aires hay mucha cultura musical, pero pocas posibilidades de ganarse la vida como cantante". Su partida, no ha tenido que ver con labrarse un futuro en un mundo que ya le había abierto de par en par todas las puertas. Es una peregrinación interior en la que él ya ha hecho fortuna.
De ese camino que emprendió para encontrarse a sí mismo y a su música nace el proyecto Xoel López y la Caravana Americana, una gira con músicos de varios países del otro lado del charco. La experiencia quedará plasmada en un documental en el que cuenta con la codirección del periodista ferrolano Arturo Lezcano y tiene su punto de llegada en los tres conciertos que ofrecerá en España en el mes de octubre. Luego, tal vez se conceda otro par de compases para hacer el Camino de Santiago de nuevo.
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