Una avería deja al Tibidabo sin funicular durante tres horas

Una avería dejó ayer a la montaña del Tibidabo tres horas sin servicio de funicular. La catenaria del tren cayó alrededor de la una del mediodía por causas que ayer se desconocían y a las cuatro de la tarde el servicio recuperó el funcionamiento con total normalidad tras repararse la avería. El incidente, calificado de "leve" por una portavoz del Ayuntamiento de Barcelona, no causó ningún herido. Durante las tres horas que no hubo funicular, un servicio de autobús llevó a los pasajeros a la montaña.

La caída de la catenaria provocó que los convoyes -son dos trenes con un conductor en cada uno que se cruzan a mitad de trayecto en un ensanchamiento de la vía- se quedaran sin luz. Al carecer de electricidad, las puertas se quedaron bloqueadas, por lo que el centenar de pasajeros -70 en el tren que subía a la montaña y 30 en el convoy que bajaba del Tibidabo- permanecieron encerrados media hora en los vagones. Los pasajeros se quejaron de que, al carecer de megafonía los trenes, no recibieron ninguna explicación de lo que pasaba hasta que les indicaron que tenían que abandonar los convoyes.

Tal como prevé el protocolo para estas situaciones, los pasajeros abandonaron los funiculares por las respectivas puertas de los conductores y llegaron a las estaciones caminando por la vía. Se da la circunstancia de que la avería detuvo a los trenes a escasos 50 metros de las estaciones por lo que la evacuación fue muy fácil.

El funicular del Tibidabo tiene 100 años de antigüedad, pero de principios del siglo pasado sólo conserva la carcasa externa de los trenes, lo que le permite mantener su imagen tradicional. El funicular estuvo mucho tiempo parado para renovar la maquinaria y los sistemas de seguridad. Las dos estaciones también fueron renovadas a fondo. Instalaciones y nueva maquinaria fueron inaugurados en 2008.