_
_
_
_

Desalojado un edificio en Arganzuela por el mal estado de sus pilares

Los inquilinos llevan dos noches fuera de su casa y no hay fecha para el realojo

David Marcial Pérez

"Han estado toda la noche dando golpes en la calle. Me levanté de la cama, miré por la ventana y vi a unos tíos con casco serrando madera en la calle". Los del casco eran los bomberos y la calle es Aldea del Fresno, en el distrito de Arganzuela. En la madrugada de ayer un vecino asistió desde su ventana al trabajo de apuntalamiento con vigas de madera de tres pilares del bloque contiguo al suyo, el nueve. Los inquilinos habían sido desalojados a toda prisa por los bomberos sobre las diez de la noche del martes y aún no saben cuándo podrán volver a sus casas.

Uno de los pisos bajos, donde estuvo situada la portería, llevaba dos semanas en obras, según el testimonio de los vecinos que ayer se arremolinaban a las puertas del edificio en busca de respuestas. Durante las obras del bajo, los obreros limpiaron uno de los pilares que estaba cubierto de baldosas. Encontraron una grieta vertical en la viga que hizo ceder unos centímetros el pilar. Llamaron inmediatamente a los bomberos que desalojaron las 20 viviendas del edificio, construido en los años cuarenta.

La posibilidad de demolición queda, en principio, descartada

Las obras de la antigua portería culminaban unas mejoras del edificio. "Hace dos años que empezamos las reformas. Arreglamos patios, vigas, ascensor. Solo faltaba revisar la portería y la conexión de los saneamientos para pasar la Inspección Técnica de Edificios", contaba Basilina González, una de las desalojadas. Elena y su familia son otros de los afectados que rondaban ayer por la mañana la puerta del inmueble. El Samur Social les ofreció, como al resto de los vecinos, un alojamiento provisional, pero prefirieron recogerse en casa de un familiar. "Yo entro ahora a trabajar y tengo el bolso, las llaves, todo, dentro de la casa", decía inquieta mientras su hijo de cuatro años correteaba a su alrededor.

Los técnicos del Ayuntamiento que evaluaron el edificio a media mañana de ayer confirmaron el mal estado de tres pilares. Comenzaron las obras de rehabilitación, y la posibilidad de demolición -que sería la segunda en una semana tras la de Collado Villalba el pasado sábado-, quedó prácticamente descartada.

A lo largo de la mañana, algunos vecinos lograron acceder al inmueble para recoger medicinas u otros bienes de primera necesidad, pero, según la información de la Concejalía de Urbanismo, las obras continuarán hoy y no hay fecha para el realojo de los inquilinos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

David Marcial Pérez
Reportero en la oficina de Ciudad de México. Está especializado en temas políticos, económicos y culturales. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera en El País. Antes trabajó en Cinco Días y Cadena Ser. Es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y máster en periodismo de El País y en Literatura Comparada por la UNED.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_