A Bridgestone le va la marcha

Los pilotos que compiten en el Mundial de fórmula 1 se citan desde hoy y hasta el domingo en el circuito de Hockenheim (Alemania), y todos ellos ya han adivinado que les espera un fin de semana más movidito que de costumbre. Resulta que Bridgestone, el suministrador de neumáticos, ha decidido poner todo lo que está en su mano para fomentar al máximo la espectacularidad de este certamen. Para ello, la marca japonesa ha decidido desplazar hasta el circuito alemán los compuestos superblandos y los duros, las dos tipologías más extremas de que dispone. Si uno tiene en cuenta la obligatoriedad de emplear los dos tipos de goma durante la carrera, la elección de Bridgestone puede traducirse en una prueba de lo más espectacular a ojos de los aficionados y, a la vez, en un dolor de cabeza para los equipos y los pilotos, que deberán encontrar la fórmula (puesta a punto) de sacar el máximo partido a sus bólidos independientemente del neumático que calcen.

En Canadá, hace ahora tres grandes premios, Bridgestone desplazó los neumáticos superblandos y los medios, y desechó los blandos, que están a medio camino entre unos y otros. En Alemania, entre la combinación elegida hay dos tipos de compuesto, y eso significa que el salto aún es más abrupto, una circunstancia que abre el abanico de posibles estrategias a seguir. A la espera de que los bólidos salgan a la pista y los pilotos calibren el nivel de abrasividad del asfalto y su temperatura, la cita del domingo se prevé tan entretenida para la hinchada como delicada para los corredores.

"Será muy difícil encontrar un balance del coche que permita sacar partido a los dos compuestos. Esta es la primera vez que este año hay un salto tan grande entre los dos neumáticos", aseguraba ayer Alonso. El asturiano ocupa el quinto puesto en la clasificación general y está a 47 puntos de Mark Webber (18 con el sistema de puntuación que se empleaba hasta el año pasado). Pero a pesar de la distancia que le separa del líder, cree que ganar el Mundial es más que probable. "Si Valencia (terminó el octavo) y Silverstone (el 14º) hubieran sido dos carreras normales, puede que ahora estuviera aquí, sentado, hablando como líder de la clasificación general", se defendió el español. "Estoy muy contento con el rendimiento del Ferrari, tenemos un buen coche y estoy seguro de que podemos pelear por el título", zanjó Alonso.